El Ayuntamiento de Alcañiz solo cederá suelo municipal para la construcción de un hospital que garantice un servicio sanitario público. Así lo aseguró el pasado lunes el alcalde de la capital bajoaragonesa, Juan Carlos Gracia (PP), en un pleno extraordinario celebrado en el consistorio a iniciativa del PSOE e Izquierda Unida.

Pese a que el equipo de gobierno ±con la abstención del PAR± rechazó en la misma sesión la moción de la oposición que solicitaba instar al Gobierno de Aragón la paralización del expediente de gestión público-privada, el primer edil se comprometió de formar verbal a garantizar un hospital de gestión pública. «Mientras esté yo de alcalde no se va a construir ningún centro donde la sanidad sea privada», aseguró Gracia.

De este modo, el ayuntamiento acordó anular el acuerdo vigente al que se llegó en el pleno del 19 de marzo de 2013 referente a la cesión de los terrenos al Gobierno de Aragón para la construcción del nuevo centro. «Con un único servicio asistencial privatizado se eliminará aquel acuerdo», ratificó Gracia. Cinco concejales del Ayuntamiento de Alcañiz explicaron a los asistentes, entre los que había vecinos, alcaldes de varios municipios de la zona y representantes políticos y sindicales, los argumentos para luchar por una construcción inmediata del nuevo centro.

TURNO DE PALABRA / «El estudio de viabilidad del hospital valora que pueda ser privatizado y nosotros nos negamos porque se trata de un servicio asistencial. Es algo que debemos hablar con el Gobierno de Aragón, pero nos opondremos a cualquier tipo de gestión privada en este área», aseguró el alcalde.

También asistieron al pleno representantes de la Plataforma en Defensa de los Servicios Públicos del Bajo Aragón, que reclamaron a la corporación municipal un «mayor compromiso» en relación al futuro hospital y protestaron porque el primer edil no les dio la palabra para intervenir en la sesión. «La postura fue de autoritarismo», apuntaron desde el colectivo. Además, la plataforma también alertó sobre «el aumento de las complicaciones postoperatorias derivadas de los recortes en plantilla» y consideraron que con la gestión que pretende la DGA «sí se verá afectada la asistencia sanitaria».

Por su parte, el consejero de Sanidad d e l Gobierno de Aragón, Ricardo Oliván, reiteró ayer en declaraciones a la Cadena Ser que «la sanidad pública está garantizada» en el hospital de Alcañiz. «Tanto en el antiguo como en el nuevo centro, que esperemos que esté construido de aquí a dos o tres años», matizó.

Oliván justificó el modelo de gestión planteado por el Ejecutivo aragonés y señaló que «una cosa es que parte de los servicios no asistenciales los ejecuten unas subcontratas, como se hace en otros hospitales de España, y otra cosa es la atención sanitaria, la de la bata blanca, que seguirá siendo ejercida por el Salud », apuntó.

Del mismo modo, el consejero añadió que el personal sanitario «continuará» bajó la gestión del Salud que «garantizará un servicio público» en Alcañiz, dijo.

PROTESTA POPULAR / El rechazo popular contra la «privatización» del futuro hospital de Alcañiz se plasmó el pasado 27 de julio a las puertas del Departamento de Sanidad, cuando la Plataforma en Defensa de los Servicios Públicos del Bajo Aragón Histórico hizo entrega en el registro del Salud de cerca de 11.000 alegaciones contra su construcción. Además, Marea Blanca también presentó una alegación económico-financiera en el Salud en la que denunció que el nuevo hospital le costaría 120 millones menos a la Administración si la gestión fuera totalmente pública.