El consejero de Industria, Arturo Aliaga, ha dicho que Endesa no tiene previsto desmantelar la central térmica de Andorra y ha vaticinado que la compañía está estudiando los condicionantes que le permitan acometer en ella la inversión requerida para hacer a la instalación medioambientalmente sostenible.

Aliaga ha respondido en el Pleno de las Cortes a dos preguntas, formuladas por los diputados de IU, Luis Ángel Romero, y CHA, Joaquín Palacín, relacionadas con las gestiones que realiza el Gobierno de Aragón para conseguir que Endesa haga las inversiones que permitan que la térmica continúe con su actividad, fijadas en 220 millones de euros.

Romero ha asegurado que en el nuevo plan de inversiones anunciado por la compañía eléctrica, por valor de 2.500 millones de euros, no aparecen las inversiones de adaptación necesarias en la central y exigidas por la Unión Europea.

IU recuerda que la dirección de la multinacional, "sin garantizar al cien por cien" la ejecución de estas inversiones, "siempre ha trasladado un mensaje optimista y de forma especial a los representantes de los trabajadores afectados", pero a Romero le ha generado inquietud la decisión reciente de Endesa de repartir 14.605 millones de euros entre sus accionistas en forma de dividendos.

También se ha referido a esta cuestión Palacín, quien ha dicho que 220 millones no son nada comparados con estos 14.600, y ambos diputados han coincidido en señalar la importancia de la térmica para la comarca de Andorra y, por extensión, para todo Teruel.

Aliaga, quien ha asegurado que habla continuamente con Endesa y el ministerio, ha explicado que la compañía, antes de acometer la inversión, tiene que analizar algunas variables, como las condiciones del mercado y las cuestiones regulatorias del sector.

En este aspecto, deberá sopesar el coste de la producción de CO2, el impuesto a la producción de energía, o el peso específico del carbón en el mix energético, para conseguir rentabilizar su inversión.

Ha recordado, además, que el Gobierno de Aragón acordó declarar estas inversiones de interés general en el mismo momento en el que se anuncien, con lo que se agilizarán los plazos y trámites para acometerlas.