IU volvió ayer a manifestar su descontento por el incumplimiento de uno de los compromisos presupuestarios tras los que la formación aprobó las pasadas cuentas municipales. En concreto, con la modificación de la ordenanza de basuras para que las empresas que tienen su propio sistema de recogida de basuras paguen el coste íntegro del servicio, 32 euros por tonelada que se lleva al vertedero. Finalmente, no se ha podido llevar a cabo la modificación de esta ordenanza debido a que los informes jurídicos aseguran que no es posible hacer diferencias entre los distintos usuarios. La propuesta del Gobierno de la ciudad pasaba también por que se incrementase el precio también a los municipios del entorno de la ciudad, algo a lo que IU se opuso. Según reiteró ayer Gimeno, no es posible establecer esa diferenciación. Alonso, por su parte, reclamó un "informe encima de la mesa que diga que no hay ninguna posibilidad".