Los aludes volvieron a aislar ayer a los clientes --22-- y trabajadores --20-- del balneario de Panticosa. Una avalancha cortó la vía por la mañana, y el helicóptero de la DGA utilizó diez detonaciones con aire comprimido para provocar otros tres y reducir el riesgo. Los operarios de carreteras del Gobierno de Aragón trabajaron durante toda la jornada pero dada la cantidad de nieve no pudieron despejar la vía a tiempo. Hoy volverán al trabajo.

La Agencia Estatal de Meteorología activó ayer la alerta amarilla por riesgo de aludes en el Pirineo, y la mantendrá hoy. Además del de Panticosa, este riesgo obligó a cerrar el acceso a Llanos del Hospital, el otro recinto que resultó aislado hace tres semanas. En esta ocasión desalojaron a los empleados antes de dar por cortada la vía, según indicaron fuentes de la DGA. El Portalet continuaba ayer cerrado por riesgo de avalanchas.

NEVADAS La nieve cayó abundante por el Pirineo y tiñó de blanco zonas más bajas, como Huesca, donde la sorpresa ciudadana se tradujo en decenas y decenas de fotos en las redes sociales, o en Cinco Villas. Según la Aemet, no se alcanzaron registros exagerados --seis litros en Aragüés, seis centímetros en el Pirineo Central--, ni viento fuerte, como anteayer.

Este sí tuvo consecuencias en Zaragoza, o al menos a él apuntaban fuentes de Endesa para justificar la avería en un cable que, ayer por la tarde, dejó sin luz a 2.000 clientes en la zona de Miguel Servet, hora y media.