Las asociaciones de madres y padres de Alumnos (Ampas) de Teruel, que aúna a ocho centros de Secundaria de la ciudad, tanto públicos como privados, han reclamado a la Consejería de Educación la vuelta a la presencialidad total de las clases debido a que los alumnos de 3º y 4º de la ESO, además de los de 1º de Bachillerato y algunos de FP, son los únicos que están siguiendo el curso de manera semipresencial. Esta medida implica que los jóvenes acuden a clase «un día sí y un día no». Así lo explica la representante de las Ampas, Carlota Ferrando, que cuenta que provoca que «el profesor dé la materia el lunes y el martes la repita para el otro grupo, por lo que van a dar la mitad de la materia», sentenció. Esto provoca que los que estén en casa no puedan acceder online a las clases debido a que «no hay una regulación de la DGA que lo obligue».

En la carta remitida a Educación, las Ampas de los centros Francés de Aranda, La Purísima y Los Santos Mártires, La Salle San José, Santa Emerenciana, Segundo de Chomón, Vega de Turia, Victoria Díez, y Las Viñas, insisten en que la presencialidad es un aspecto «que no puede ser suplido por ninguna otra forma pedagógica» y que está «demostrado que la semipresencialidad no está funcionando». Además, insisten en que como padres, ven que dicho sistema «requiere un importante grado de responsabilidad y autonomía que los adolescentes van adquiriendo al ir acompañados de la planificación y atención necesaria».

Ante este aspecto, Ferrando insiste en que incluso se conformarían con que hubiera una regulación de las clases online para que los alumnos pudieran acceder desde casa a lo que esté pasando en el instituto «y conseguir de esta manera seguir el ritmo de trabajo de todo el grupo».

Ferrando hace hincapié en que hay profesores que «por su cuenta» sí que dan también sus clases de manera telemática para aquellos alumnos a los que ese día les toca quedarse en casa. «El problema es que hay otros que no lo hacen así y no hay nada que les obligue a hacerlo por lo que depende de lo que ellos quieran hacer».

Los alumnos de 2º de Bachillerato sí que volvieron a la presencialidad total debido a la complejidad del curso y a la importancia del mismo, pero no ocurre lo mismo con los de un año menos. «No están yendo a clase por lo que no van a dar todo el temario y este también es un curso muy importante porque cuenta en la media para la EvAU», explicó.

La representante de las Ampas asegura que «si el instituto no se quiere gastar dinero en el material necesario para retransmitir las clases, los padres nos haremos cargo» debido a que son conscientes de que «nuestros hijos van a ser los más perjudicados». Además, insiste en que en otras comunidades no está siendo así y que «se está viendo que el instituto no es un foco de contagio».

La DGA apuesta por un cambio en cuanto la situación sea la adecuada

Ante las continuas quejas por parte de los centros educativos, el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón, al igual que comunicó el lunes también el presidente de la comunidad, Javier Lambán, asegura que se «apuesta por la presencialidad total». A pesar de esto, insisten en que para poder comenzar a llevarlo a cabo, «debe mejorar la situación epidemiológica en Aragón». De momento, sigue sin haber una fecha concreta y, a falta de apenas unas semanas para comenzar los festivos por Navidad, Lambán ya mencionó que será próximamente cuando todos los alumnos de Secundaria y Bachillerato, que están alternando un modelo de semipresencialidad, volverán a las aulas. En este sentido, ya adelantaron que el cambio será «simultáneo» y que no se prevén plazos diferentes para llevarlo a cabo.