La Asociación Nacional de Animales con Derechos y Libertades ha interpuesto un recurso de apelación ante la Audiencia de Huesca contra el archivo de la denuncia interpuesta contra un cazador de Huesca por presunto maltrato a un zorro al que torturó hasta la muerte.

En su recurso, al que ha tenido acceso Efe, la representación legal de la asociación insiste en que la acción del cazador tiene relevancia penal al estar acreditado pericialmente que el zorro estaba indefenso y bajo el control del denunciado por una lesión que le impidió huir.

La instructora del caso desestimó la petición de Anadel en dos ocasiones al entender que aunque los hechos podían ser calificados como "conductas de maltrato animal cometidas con ensañamiento y con resultado de muerte", carecían de relevancia penal al no estar tipificado como delito el maltrato a animales no domésticos.

El recurso aprecia, de acuerdo con la magistrada, que los hechos tienen un carácter brutal, pero discrepa respecto a la relevancia penal tanto de la agresión infligida al animal como de la posterior difusión en las redes sociales de un vídeo que recoge el maltrato.

El letrado de Anadel, Jorge Piedrafita, ha señalado, en declaraciones a Efe, que la "brutal acción" no puede ser considerada una acción de caza puesto que el animal "asesinado" se encontraba en esos momentos bajo total control humano debido a la lesión que sufría.

Piedrafita destaca en su recurso que a pesar de no ser en principio un animal doméstico, la prueba pericial que se realizó a partir del vídeo revela que el zorro mostró en todo momento un carácter "manso y dócil" y sin atributo alguno de estado salvaje, lo que, a su juicio, le hacía equivaler en ese momento a un animal doméstico.

También rechaza los argumentos de la juez respecto al carácter de espectáculo dado por el denunciado al difundir el vídeo por la red al considerar sólo sancionables penalmente los de peleas de animales que se realizan ilegalmente frente a un público presencial.

El letrado se sirve de jurisprudencia del Supremo para establecer que el alto tribunal no distingue entre los espectáculos de maltrato animal los autorizados o los no autorizados.

A juicio de Piedrafita, la difusión de los hechos "constituyen un espectáculo con relevancia penal que merece una respuesta jurídica adecuada para tratar de evitar que un suceso así vuelva a suceder".

"Desde la asociación -ha añadido a Efe- se trabajará en todas las vías y escenarios legales para que se mejore la legislación y ningún acto quede impune".