¿Quién eres ansotana de la curva y qué quieres decirnos? La mujer ataviada con el traje tradicional de Ansó que cautivó a todo el pueblo durante el 2015, cuando fue dibujada en enero, borrada y devuelta de nuevo en agosto a una de las curvas más conocidas de la carretera que da acceso al municipio oscense de la Jacetania, ha vuelto a sus vidas. Desde el pasado jueves, «entre las 20.00 y las 22.00 horas» alguien la devolvió a la pared de hormigón que hay bajo la Monja y el Fraile, una escultura tallada en roca por la lluvia y que todos conocen en el municipio. Y ha llegado para quedarse mientras le dejen, alimentando un misterio que ya ha dado el salto a internet.

La imagen recuerda a la misma, pero esta vez trae consigo un llamativo tridente en la mano izquierda, un bote de espray en la derecha y la falda hondeando al viento. Una respuesta a quienes pensaban que dibujarla era tan sencillo como utilizar unas plantillas, puesto que cambia el gesto, aparentemente más combativo que aquella que hizo pensar a los vecinos que aquella misteriosa mujer obedecía a alguna historia sentimental o personal vinculada a alguien del pueblo.

Sigue siendo protagonista en conversaciones entre los vecinos, que hoy, a diferencia del 2015, pueden encontrar en internet una explicación a esa imagen que rápidamente bautizaron como ansotana de la curva. Concretamente, desde el 31 de marzo del 2016, cuando alguien, también anónimo que tomó prestado su nombre, colgó en el canal de YouTube el primer capítulo de lo que parece que será una serie de mensajes al mundo desde esa cara sonriente ataviada con el traje típico de la localidad.

Un buen día para sonreir. Así se titulaba un vídeo que ya cuenta con 1.800 visualizaciones y que se presentaba a los internautas con un claro objetivo: «Aquí se explican los motivos más profundos para que la ansotana sonría al mundo....». En él cuenta cómo la mismo noche en la que apareció la ansotana en la carretera de Ansó, a miles de kilómetros de allí, la localidad de Kobane, en la frontera de Siria y Turquía, era liberada tras seis meses de asedio «durísima y necesaria lucha» contra el ISIS. Así que ese era el motivo para sonreir al mundo. Finaliza dedicándoselo a Ruqqia Hassan, la primera mujer periodista que fue ejecutada por este.

Llama la atención que poco antes de su muerte, en septiembre del 2015, fuera cuando reapareció junto a los túneles de Ansó por segunda vez la ansotana de la curva. Acompañada por versos de Octavio Paz: «Hecho de aire, entre pinos y roca surge el poema».

La actual ansotana de la curva ha cambiado su mensaje. «La sonrisa en tu boca es primavera». La recién estrenada estación ha traído consigo a su imagen y, como hace casi un año, esta vez el mensaje no se ha hecho esperar. Otro vídeo colgado en YouTube, el capítulo 2: «No pienso entrar en el túnel» reza el título. En tan solo 48 horas ya contaba con 1.049 visualizaciones, y también explica su retorno, que «vuelve después de ser atacada de la manera más soez por un misógino al que le molestaba la belleza de las mujeres». Publicado el mismo día que alguien decidió revivirla en Ansó para reintentar que sea eterna.

Mientras, el vídeo recuerda el drama del pueblo sirio que busca refugio lejos de la guerra, la imagen del niño Aylan que conmocionó al mundo, el atentado en el Bataclan parisino o la masacre en Alepo. «Quien salva una vida salva a la humanidad». Un lema de los cascos blancos que quizá desea para ella.