--¿Por qué es tan importante el desdoblamiento de la N-232?

--Por distintos motivos. Primero por la seguridad de las personas, sólo hay que ver los continuos accidentes que se producen, pero también por el propio desarrollo social, económico e industrial de toda esta zona.

--¿Parece más factible esa obra ahora que hace un año?

--Sí, por supuesto. Cuando hace un año, por estas fechas, decidimos constituir una plataforma para reivindicar el desdoblamiento de la N-232 entre Mallén y Figueruelas parecía impensable llegar al punto donde ahora estamos. De momento, el Gobierno entrante ha destinado ya 300.000 euros para los estudios previos. Así que hemos avanzado tres años en el proceso.

--¿Cuál es el plazo previsto?

--La misma carretera a su paso por la comunidad de Navarra ya está en obras. Las previsiones son que en el 2007 el desdoblamiento llegue al límite con Aragón. Nuestro objetivo es que para entonces la obra esté en pleno proceso de licitación --con los estudios previos y los proyectos aprobados-- para poder continuarla sin más demora.

--El desdoblamiento favorecería aún más la situación estratégica de Mallén.

--Efectivamente. Mallén se encuentra en una situación estratégica muy importante, en un punto equidistante de Barcelona, Madrid, Valencia y Bilbao, que es lo que buscan las empresas para rentabilizar la distribución. Todo esto se verá multiplicado con el desdoblamiento, así como con la autopista desde Gallur y Mallén hasta Cariñena que ha respaldado la DGA y que desahogará todo el tráfico que circula entre el norte y el Mediterráneo.

--Desde un municipio limítrofe con Navarra --como es Mallén--, ¿cómo se ve Aragón?

--Yo soy optimista. Estamos despertando y hemos empezado a creer en nosotros mismos. Es verdad que años atrás la balanza se inclinaba más hacia Navarra, porque ha sido una comunidad más rica y con mayores beneficios fiscales, por lo que los empresarios se sentían más atraídos. Sin embargo, ahora se ha producido un empujón industrial en Aragón, algo que salta a la vista.

--El pasado y el presente industrial del corredor del Ebro ha estado en GM, ¿dónde está su futuro?

--Opel ha sido y sigue siendo muy importante para el corredor del Ebro. El sector automovilístico ha revolucionado la industria de la zona, pero también hay que tener en cuenta que en cualquier momento nos puede dar un susto, como ha sucedido ahora. Hay muchas empresas que dependen de la planta de Opel en Figueruelas y eso tiene sus inconvenientes. La estabilidad económica de la zona pasa también por diversificar y descentralizar la industria. De esta forma, si en un momento hay un sector que sufre un desequilibrio se podrá compensar.

--¿Y en Mallén?

--Hay mucha competencia entre los municipios para acoger polígonos industriales y las poblaciones más cercanas a Zaragoza tienen más posibilidades. No obstante, nuestro reto es asentar nuevas empresas que garanticen la estabilidad y el crecimiento de esta localidad y de su entorno.

--Pero el hombre no sólo vive de industria...

--Ya. Trabajamos para crear nuevos servicios y aumentar la calidad de vida de los vecinos. Hace poco inauguramos una nueva escuela de educación Infantil y tenemos centros de Primaria y Secundaria. Ahora, nuestro reto es poder ampliar los estudios con módulos de Formación Profesional. Al mismo tiempo que trabajamos para lograr asentamientos industriales, queremos preparar a nuestros jóvenes para que tengan la formación adecuada. Hace 25 años, Mallén era un pueblo eminentemente agrícola, pero la gente ha ido vendiendo sus fincas a grandes agricultores y se dedica al sector industrial.