--Como comenzó su afición?

--Cuando uno tenía catorce años ya se podía colocar de aprendiz. Yo entré en Fotos Eskogler, creo que era austriaco judío.

--¿Y le enseñó fotografía?

--Sí, allí estuve hasta que me fui a la mili, a los 21 años. A la vuelta de la mili volví a la casa como oficial. Luego pasé a atender tres talleres hasta que aprendí una nueva forma de fotografía en Estampas del Valle, más industrial. El cambio era pasar de fotografía individual al por mayor.

--¿Acabó instalándose por su cuenta?

--Sí, me instalé en Escuelas Pías. Monté Ediciones Sicilia, para hacer postales. Sobre todo foto de paisaje, me gustaba mucho la montaña.

--¿Y daba de sí?

--Se pasaron sus apuros porque estaba todo por hacer y solo había cuatro fotos. Sería el año 54, yo con treinta años. Era un negocio virgen.

--¿Se recorrió todo Aragón?

--Todo Aragón y sus alrededores (risas). Iba a los pueblos, hacía fotos pintorescas y se las vendía al comercio a través de un representante.

--Veo que ha hecho fotos en otras partes de España.

--Sí, también en Asturias. Galicia, en fin... Casi tengo toda España en blanco y negro. Luego llegó el color y ya solo trabajé en el Pirineo y algo de Andalucía.

--¿Guarda todos los negativos?

--Sí, no se puede calcular los que tengo. El archivo lo tengo organizado.

--¿Nunca le tentó hacer fotografía social?

--No exactamente. Hice calles, pero para turismo. No me interesaba tanto la gente como las calles. Y como también tenía estudio hacía retratos y previamente charlaba un poco con el cliente para descubrir su personalidad. Sí hice retratos de gente con trajes, por ejemplo en Ansó.

--La foto de la exposición con esos montañeros mirando al horizonte es preciosa.

--Uno de los montañeros soy yo, mirando al pico Lanayet.

--¿Qué cámaras tuvo?

--¡Uf! Empecé con placas de 10X15. Finalmente me hice con cámaras para panorámicas y tengo una Hasseblad, equipada con varios objetivos. Y trabajaba con dos chasis para intercambiar. Un paisaje necesita mucha definición, mucha calidad.

--Tiene un libro de aventuras.

--Sí, las he pasado de todos los colores. Me he subido por paredes que luego no sabía por dónde volver.

--¿Cuántas fotos hay en la exposición de Geológicas?

--Yo he llevado una selección y ellos han seleccionado unas cuarenta.