--¿Cuál es la incidencia del asma en Aragón y cómo es en relación con otras comunidades?

--No disponemos de estudios actualizados sobre incidencia de asma en la comunidad. De forma aproximada, la prevalencia debería estar entre un 5 y 15 % en función de la edad que estudiemos, pero no es un dato que se pueda afirmar rotundamente. El problema es que existen muchos casos sin diagnosticar y, por tanto, sin tratamiento.

--¿Continúa el incremento detectado en años anteriores?

--A lo largo de las últimas décadas se venía observando un aumento de la prevalencia del asma y de las enfermedades alérgicas, aunque en la última década los datos parecen apuntar a que se ha alcanzado un techo.

--¿Qué factores favorecen su aparición?

--Los más probables son la contaminación atmosférica y la exposición a tabaco y a tóxicos laborales. En general, parece claramente demostrado que hay una asociación entre las enfermedades alérgicas y el estilo de vida occidental. Un papel clave en esta enfermedad es el desarrollado por las infecciones por virus.

--¿Cómo afecta al día a día del paciente?

--Desgraciadamente, el asma produce un deterioro importante de la calidad de vida. Actualmente, en España entre un 30% y un 50% de los pacientes asmáticos están mal controlados, lo que significa que en muchas ocasiones ven alterado su sueño o su capacidad para hacer ejercicio o deporte y al rendimiento laboral y escolar. En los casos más graves presentan frecuentes crisis de ahogo o falta de aire, tos y presión en el pecho que les obliga a depender continuamente de su medicación. Este grupo de problemas desemboca en absentismo escolar y laboral y un importante consumo de recursos sociosanitarios.

--¿Existe un perfil determinado de afectado?

--El asma es una enfermedad muy compleja y versátil. Existen muchos fenotipos de asmáticos. Podemos ver desde enfermos que desarrollan un asma a partir de una infección respiratoria infantil hasta adultos con asma laboral o ancianos con formas de asma grave. Tradicionalmente, se ha considerado una enfermedad de niños y jóvenes, pero no es así. En un estudio reciente realizado en España, el 27,5% de los pacientes tenía más de 65 años y el 43,1 % entre 41 y 65.

--¿Cuáles son las últimas novedades en su tratamiento?

--El desarrollo de nuevos tratamientos contra la Inmunoglobulina E y la utilización de medicación broncodilatadora con anticolinérgicos, que tradicionalmente se utilizaba en pacientes con Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

--Usted ha estado implicado en un programa de investigación sobre el asma infantil. ¿Qué conclusiones ha obtenido?

--El estudio se realizó en el curso escolar 2007-2008 en niños de nuestra ciudad de entre 10 y 12 años. Las principales conclusiones fueron que entre un 15,8% y un 25,3 % de los escolares presentaban unos síntomas compatibles con padecer asma. Encontramos varios factores de riesgo para padecer un asma, como haber sido ingresado en un hospital por enfermedad respiratoria bronquial, rinitis, así como tener pruebas de alergia positivas para el hongo Alternaria y pólenes de gramineas, y por fin tener antecedentes de alergia en la familia.