Unas 10.000 familias podrán beneficiarse a partir de los próximos meses de los cambios introducidos en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para favorecer la instalación de ascensores en los edificios antiguos de la capital aragonesa. La Gerencia de Urbanismo aprobó ayer de forma definitiva las modificaciones normativas, una vez recibido el informe favorable del Gobierno de Aragón. El último trámite para dar efectividad a esta medida será su aprobación final el viernes, en el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza.

El impulsor de este cambio normativo ha sido el teniente de alcalde de Urbanismo, Antonio Gaspar, quien se comprometió ya en febrero con los afectados de varios bloques de viviendas de Las Fuentes a desbloquear las licencias y facilitar al máximo la instalación.

Ahora, con las modificaciones introducidas en el PGOU, se podrá desplazar la escalera de la comunidad para colocar el ascensor, se podrá ocupar además más espacio de los patios de luces y ya no será requisito indispensable la unanimidad de los residentes para conceder la licencia correspondiente.

La polémica en torno a la instalación de estas medidas se suscitó a raíz de una denuncia formulada en el mes de febrero por un grupo de vecinos de la calle Monasterio de Ripoll. Como informó este diario, Urbanismo les negó el permiso amparándose en el PGOU entonces vigente. A la indignación de estos afectados del barrio de Las Fuentes, muchos de ellos mayores y con problemas de movilidad, se sumaron pronto la de otros sectores como Delicias, San José, Oliver y Valdefierro.

Desde el mes de febrero en el que se produjeron las primeras reuniones entre Urbanismo y las comunidades de vecinos hasta la aprobación definitiva han pasado cinco meses. Se puede calificar como "rápida" la actuación de este organismo si se tiene en cuenta que en este periodo se han redactado los cambios, se han aprobado inicialmente, se han sometido a exposición pública y se han trasladado al Consejo de Ordenación del Territorio Aragonés (organismo dependiente del Gobierno Aragonés que tiene que autorizar cualquier modificación que se produzca en el PGOU).

SIN ALEGACIONES Ayer, tras la aprobación del expediente, el teniente de alcalde de Urbanismo, Antonio Gaspar, aseguró que la reforma del PGOU no ha contado con ninguna alegación en el tiempo que ha permanecido en exposición pública y que queda salvaguardada la parte de los derechos civiles que corresponden a cada cual.