A quí no tenemos residuos químicos ni utilizamos metales pesados", dijo a EL PERIODICO DE ARAGON Juan Vallés Soriano, gerente de una empresa de curtidos de piel de Odena (Barcelona) e imputado por la magistrada del juzgado de Instrucción número 4 de Igualada como presunto responsable de vertidos tóxicos en la comarca igualadina y principal sospechoso del envío de desechos a Fraga durante varios meses este año.

El gerente de Juan Vallés Soriano, SL afirmó: "En mi empresa no tenemos ningún residuo tóxico. Yo no tengo que dar ninguna explicación. No hablo de cosas que no vienen a cuento".

Vallés no ha sido citado a declarar todavía. Según fuentes judiciales, será llamado cuando la juez reciba los informes sobre los vertidos que está elaborando el Seprona.

La magistrada ha desgajado la causa inicial en tres bloques. Uno, referente a un abocamiento de materiales sólidos, ha sido archivado al concluir los análisis que no eran sustancias tóxicas. Otro, en el que está imputado Vallés y que sigue instruyendo ella, versa sobre el vertido de líquidos químicos en Barcelona. El tercero, sobre los desechos que trasladaban hasta Fraga para verterlos en un campo los camiones de la empresa leridana Sevigranja, lo ha remitido al juzgado de Fraga. Estas diligencias están pendientes de que el Seprona, la DGA y la CHE concluyan sus informes sobre la composición de los vertidos y su posible afección a las aguas subterráneas.

El gerente de Sevigranja Ramón Ramells, sostiene que el líquido que transportaban de Odena a Fraga sus camiones era "abono líquido" que cargan "en varias empresas". "En Cataluña se echa y salen buenos rendimientos. Aquí el único que pierde es el agricultor", añadió.

Ramells, que puntualizó que su empresa está especializada en transportar y aplicar abonos, reconoció que desde julio sus vehículos no llevan material a Fraga. El Seprona interceptó una de sus cubas cuando vertía líquido el 29 de julio.

El transportista anotó también que Sevigranja lleva años sin tener contactos con firmas peleteras.