La Asociación Aragonesa para la Dependencia (Arade) se suma a la reivindicación realizada desde las asociaciones profesionales de todas las comunidades a través de Ceaps (Círculo Empresarial de Atención a las Personas) para exigir al Ministerio de Sanidad que las trabajadoras y trabajadores del sector sean declarados oficialmente profesionales del nivel 1, como lo son los profesionales sanitarios, "y por lo tanto se les haga la prueba diagnóstica de coronavirus, especialmente si presentan síntomas", explican.

La solicitud se realiza tras la reunión por videoconferencia ayer de todas las patronales de las comunidades. "Las profesionales del sector de atención a los mayores están trabajando en primera línea con el colectivo más vulnerable de esta crisis y lo primero es tener a nuestro personal en perfectas condiciones de salud para que ellos estén protegidos y proteger así a nuestros mayores”, apunta Paquita Morata, gerente de Arade. “Ellas también son las heroínas de esta crisis, pues están poniendo en riesgo su salud para cuidar de nuestros mayores, y ahora mismo su defensa frente al virus no se está abordando correctamente”, alerta Morata.

El reconocimiento del nivel 1 conlleva la provisión de EPIS (mascarillas, gafas, gel hidroalcohólico, guantes, batas) para garantizar la seguridad de trabajadores y usuarios. Entre las peticiones al ministerio está la publicación de un decreto y/o normativa de "flexibilización de personal y de tareas" para dar respuesta a la situación actual y a la que pueda producirse en los próximos días y semanas.

Respecto a la atención domiciliaria, desde Arade señalan que las empresas "no disponen de material de protección" para dar a los trabajadores que se desplazan hasta cada hogar. "El servicio se siente totalmente desatendido. Si no disponen del material los usuarios no quieren ser atendidos por los trabajadores y estos a su vez no están protegidos", dicen.