El Consejo de Gobierno aprobó ayer el acuerdo de adhesión al Fondo de Liquidez Autonómico para 2018, pero el Ejecutivo ya trabaja en la fórmulas de financiación para el futuro, cuando deje de ser necesario recurrir a este mecanismo para financiarse por sus propios medios.

El consejero de Presidencia, Vicente Guillén, explicó que el Departamento de Hacienda ya trabaja, por ejemplo, en la opción «de futuro» que suponen los «bonos verdes», que sirven para financiar proyectos de energías alternativas, eficiencia medioambiental, transporte limpio, gestión de residuos y adaptación al cambio climático. Eso supone que el Gobierno de Aragón baraja un horizonte en el que no tenga que recurrir al FLA para financiarse y pueda hacerlo en el mercado, con sus propios medios, pero con productos «absolutamente sostenibles».

En cuanto al FLA del 2018, según los datos remitidos por el Ministerio de Hacienda al Gobierno de Aragón sobre el importe correspondiente al primer trimestre del año, este ascenderá a 441,46 millones de euros: 395,32 millones para amortizar vencimientos, 8,85 millones para financiar la devolución de las liquidaciones negativas del 2008 y 2009, y 37,29 millones para financiar el objetivo de déficit de 2018 del 0,4% del PIB. Los créditos se conceden con un tipo de interés del 0,84%.

El acuerdo de adhesión al FLA exige a la DGA los mismos compromisos que el de 2017.