Los ingresos tributarios han aumentado en Aragón un 8,54 por ciento en el primer semestre del año respecto al mismo periodo de 2016, con una recaudación de más de 1.608 millones de euros, el 47,35 por ciento de lo previsto.

Ese es uno de los datos que hoy ha destacado el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, de la evolución de los ingresos hasta junio y que le hacen prever que la ejecución será cercana al cien por ciento al finalizar el ejercicio, y también será muy alta en gastos, -en el semestre han alcanzado 2.038 millones frente a 2.099 del ejercicio pasado- en contra de lo vaticinado por la oposición por la tardanza en la aprobación del presupuesto.

Según los datos aportados por el Gobierno de Aragón, del total de derechos reconocidos en el presupuesto de 2017 en concepto de tributos cedidos, que ascienden a 419 millones de euros, en junio se había ejecutado el 49,81 % (208.713.618 euros, un 21,05 ciento más que hasta junio de 2016).

Todos los impuestos presentan un comportamiento más favorable que el año pasado, entre ellos uno de los más polémicos, el de Sucesiones y Donaciones, con derechos reconocidos por más de 98,5 millones, el 69,42 por ciento de lo previsto y casi un 44 por ciento más que en el primer semestre de 2016, según Gimeno, porque este año opera en todo el ejercicio.

El Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales ha registrado una ejecución de 56,5 millones, un 45,58 % frente al 36,52 % de 2016, y el Actos Jurídicos Documentos, con 27,1 millones, ha alzando una ejecución del 47,52 % frente al 41,65 % del año pasado.

Por lo que respecta a los tributos propios, con un presupuesto definitivo de 133,54 millones en 2017, en el mes de junio la ejecución alcanzó 52.176.972 euros, el 39,07 % del total previsto.

Entre esos figura el de Contaminación de las Aguas, con derechos reconocidos hasta junio por 32 millones, el 42,77 % de lo previsto, y en este punto, ha criticado que el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, utilice la institución para enviar cartas a los vecinos, que él recibió ayer mismo, para posicionarse en contra de este impuesto cuando la ley se tiene que cumplir, guste o no.

"Lo único que creo que ha cuidado es en los matices y el perfil, para no incurrir en un delito", ha remarcado.

En la rueda de prensa, Gimeno también ha afirmado que el cierre presupuestario se dejará para el último trimestre, para preparar la liquidación, y ha avanzado que ya se trabaja en la elaboración de las cuentas del año que viene, dado que ya se conoce cuál será la participación de ingresos del Estado.

En ese aspecto, ha indicado que espera poder negociar con los grupos de la izquierda, fundamentalmente con Podemos, el techo de gasto del año próximo tras el debate sobre el estado de la comunidad, teniendo en cuenta además que el PP ya ha anunciado que no cederá siquiera en las modificaciones presupuestarias.

El techo de gasto es el paso previo para poder negociar el presupuesto de 2018, ha indicado Gimeno, quien ha opinado que en esta ocasión los partidos de la izquierda tienen "muy difícil" no respaldar las cuentas.

Ha destacado también que sigue adelante el complejo debate sobre la reforma de la financiación autonómica, y antes de fin de mes el Gobierno de Aragón designará al técnico que participará en las siguientes sesiones, que será un alto cargo.

No obstante, ha criticado el "ruido" que está habiendo y la actitud de comunidades como la Valenciana, Madrid o Cataluña, que "se pasan el día diciendo que están muy mal financiadas" y se comparan con Cantabria cuando es "absurdo" y además fueron las que en 2009 "se llevaron la mejor parte".

Para Gimeno, esos discursos son "técnicamente insoportables y políticamente inadmisibles" y frente a esas comunidades, ha dicho, Aragón y otras autonomías aspiran a recuperar espacio teniendo en cuenta que el coste de los servicios por habitante es más alto por la dispersión territorial.

Ha incidido en que hay comunidades que no utilizan toda su capacidad normativa para tener más ingresos con impuestos y además, ha apuntado que se tendrá que analizar qué comunidades "despilfarran" y cuáles "mienten".

Gimeno ha asegurado que Aragón será solidaria para garantizar la prestación de servicios para toda la población española pero con los territorios, ha aseverado, "no habrá posición nacionalista que no pueda ser superada por Aragón".

También se ha congratulado de la mejoría de la situación económica, pero ha defendido una reforma laboral, para que los sindicatos y trabajadores tengan más capacidad de negociación, y el aumento de salarios, al tiempo que ha estimado que la tasa de paro, del 11,40 %, bajará en los dos próximos años entre dos y tres puntos, a un nivel cercano al 2008 de la Expo.

Además, ha destacado que en los próximos dos años están previstas inversiones privadas en Aragón relativas a proyectos eólicos y agroalimentarios por más de 2.000 millones, por encima de las que hubo para la Expo, y ha subrayado que el Gobierno de Aragón tiene la obligación de garantizar que se produzcan, poniendo la administración "al ritmo", con las reformas para que no se paralicen.

Gimeno ha comentado también, entre los retos que ha de afrontar el Gobierno, la reforma de la administración electrónica y la convocatoria de ofertas públicas de empleo, que espera que se puedan anunciar en septiembre, con todas las plazas que sean posibles para resolver problemas en determinados servicios, como la sanidad.