La incidencia de brotes epidémicos en Aragón en el año 2013 fue la más alta desde que Salud Pública recoge estos datos. Los 225 brotes detectados en la comunidad autónoma (26 en Teruel, 25 en Huesca y 174 en Zaragoza) suponen la cifra más elevada que se ha registrado en los últimos 15 años y un aumento del 35% respecto al año anterior, cuando se registraron 168 episodios.

El último boletín epidemiológico editado por el Departamento de Sanidad, en el que se muestran los datos provisionales del pasado año, expone que las intoxicaciones alimentarias vuelven a ser el tipo de brote más frecuente (98) y suponen el 43% de los totales.

De hecho, el conjunto de las toxiinfecciones alimentarias (TIA) y gastroenteritis agudas (GEA) --esta última con 38 brotes-- suman un total de 136 de los 225 registros acumulados. En ellos, los agentes etiológicos detectados más frecuentemente son diferentes especies de salmonella, que ocasionan 62 de los 98 brotes de TIA (63%) y 12 de los 38 de GEA (32%). No obstante, en 26 (26,5%) de los brotes de intoxicaciones alimentarias y en 24 (63%) de los de GEA no pudo definirse el agente etiológico, siendo probable que una considerable proporción de ellos pudieran estar ocasionados también por especies de salmonella.

NUEVOS BROTES

En el 2013 también destacó la detección de 4 brotes de TIA por consumo de setas tóxicas, probablemente, según indica el propio boletín epidemiológico, como resultado de "una tendencia creciente en la actividad de recolección, en muchas ocasiones por personas inexpertas" y 4 brotes de escombrotoxismo --producido por la ingesta de alimentos que contienen un elevado contenido en histamina, que se forma por un exceso de la relación entre tiempo y temperatura desde que se produce la captura del pescado hasta la llegada al propio mercado y cuya mala conservación provoca que proliferen diversas bacterias--.

Salud Pública también detectó hasta 89 brotes por otras causas, entre las que destacaron los 30 de parotiditis, es decir, las paperas, 10 de escabiosis, 8 de infección por enterovirus, 6 de tuberculosis, 4 de intoxicación por monóxido de carbono y 4 de varicela, siendo el resto de factores de menor frecuencia.

La proliferación de las paperas supone uno de los aspectos más relevantes del documento elaborado por Salud. De hecho, en el año 2013 se produjo un aumento del 66% en esta incidencia respecto a los 18 brotes que se habían dado en el 2012.

En este caso, el aumento de la incidencia fue generalizado en toda España, donde se llegó a duplicar el número de casos detectados. Según los expertos, el motivo, aparte de los diversos cambios de ciclos epidémicos, que se producen ahora, actualmente cada cinco o siete años, habría un problema asociado relacionado con el hecho de que entre 1993 y 1999 se puso en el mercado una vacuna que incluía una cepa que, según las autoridades sanitarias, no era todo lo eficaz que se esperaba. Su grado de eficacia apenas era del 10%.

Por tanto, la población con mayor riesgo de padecer paperas son las personas que se inocularon esa vacuna, que actualmente tienen entre 14 y 20 años, y que posteriormente no se han revacunado con una dosis cuya fiabilidad sea mayor que la previa, con una eficacia muy baja. En este sentido, Salud Pública recomienda que se vuelvan a vacunar para evitar así poder sufrir esta patología ahora que la vacuna ha sido mejorada y su nivel de efctividad ha superaro la barrera del 10% minimizando los riesgos.