Aragón podría contar actualmente con alrededor de un centenar de centros de difícil desempeño, una vez que el Departamento de Educación está elaborando un estudio para actualizar una catalogación que no se lleva a cabo desde 1991.
La denominación se extenderá, sobre todo, debido al agravio comparativo denunciado por los docentes a la hora de participar en concursos de traslados. Porque los profesionales de otras comunidades autónomas partían con ventaja al contar con una puntuación mayor debido a su estancia en estos centros de difícil desempeño, una distinción a la que se acogen la mayoría de rurales. Pero en Aragón no era así.
Hace apenas una semana, Educación trasladó a los sindicatos una primera lista de centros de difícil desempeño en el medio rural atendiendo a unos criterios generales, como la distancia a poblaciones de 5.000 habitantes o el difícil acceso.
Según este listado, la provincia de Zaragoza pasará a contar con 23 centros de difícil desempeño. Para ello, deben cumplir alguno de los siguientes criterios: ser un centro de Infantil y Primaria no adscrito a un Centro Rural Agrupado (CRA) a más de 45 kilómetros de una localidad de 5.000 habitantes, ser una escuela unitaria, estar aislado o con difícil acceso, ser un centro de dos o tres unidades y al menos cinco niveles o ser un CRA en el que todas las localidades que lo integran tengan de una a tres unidades y al menos cuatro niveles. De los 61 centros rurales de la provincia de Huesca, 27 lo serían de difícil desempeño, a los que hay que añadir otros 20 en Teruel.
El ámbito urbano no tiene los criterios tan definidos como el rural a la hora de designar un centro como de difícil desempeño. Precisamente, la DGA trabaja ahora en perfilar esos criterios objetivos que deberán presidir esta denominación. Entre ellos figurarán la presencia de numerosas familias extranjeras o rentas bajas.
Además, los centros de Educación Especial también serán de difícil desempeño.
