Francisco Aranda Manzano está al frente desde hace dos meses de la organización empresarial de logística y transporte (Uno). Ayer visitó la capital aragonesa para firmar un acuerdo con el Zaragoza Logistics Center (ZLC).

-¿Cómo está el sector?

-Está en plena efervescencia. En muy pocos años la logística se ha convertido en la gran ventaja competitiva de las empresas. El valor diferencial ya no es solo vender productos y servicios buenos, sino hacerlo además en el momento que el cliente quiere. Es estrategia y eso lo da la logística. Por eso los responsables de este área en las empresas están en el primerísimo nivel.

-¿Cuáles son los retos?

-España y Aragón puedan convertirse en un hub logístico del comercio internacional muy importante, con la creación de riqueza y empleo que esto lleva aparejado. Por eso, instituciones como ZLC son clave porque aportan conocimiento e investigación aplicada que se puede llevar directamente a las empresas.

-¿En qué posición ve a Aragón dentro de este mercado?

-La semana pasada felicité al presidente Javier Lambán por su apuesta por la logística, que además ya tiene resultados, con más de 34.000 trabajadores en la comunidad, el 5% del PIB y creciendo. Es evidente que es un sector con futuro. Aragón está haciendo bien las cosas. Eso que se dice de que hay que trabajar de forma colaborativa aquí se está cumpliendo, con cooperación pública-privada, un ecosistema favorable para las empresas, conocimiento a través de ZLC, ubicación geográfica, una aeropuerto gestionada de forma muy eficiente... Todo eso ayuda. No exageramos si decimos que Aragón es un Silicon Valley de la logística mundial y tiene imanes muy potentes para atraer inversiones.

-¿Cómo está impactando el comercio electrónico?

-Hace siete años el sector repartía cada día en España alrededor de 125.000 paquetes. Hoy son un millón y medio. Eso no sería posible sin una logística supermoderna e innovadora, algo que viene a través de la digitalización. Este sector además tiene la suerte de que necesita cosas que son muy complementarias: nuevas tecnologías y capital humana formado. Las empresas de logística hoy en día son empresas digitales.

-¿Faltan transportistas?

-Faltan profesionales en muchos sectores y en el nuestro también. Necesitamos repartidores de última milla con nuevas habilidades y conocimientos. No es una persona que lleva un paquete de un punto a otro, sino que debe utilizar una PDA, tener conocimientos de atención al cliente y márketing, saber diseñar una ruta eficiente.... Un profesional mucho más completo y con formación en nuevas tecnologías.

-La siniestralidad laboral de los repartidores se ha disparado.

-Lógicamente es un tema que nos preocupa. Como hay más furgonetas, la incidencia de la siniestralidad crece. Ya estamos poniendo en marcha planes de trabajo sobre seguridad vial y prevención de riesgos laborales.

-¿Cómo se puede mejorar el reparto en las ciudades?

-Lo que hay que hacer es sentar en una mesa a la administración y a los actores implicados. Antes de tomar decisiones hay analizar los datos y conocer con exactitud cuántas zonas de carga y descarga existen y qué uso tienen.