Como ya hizo con el Plan Hidrológico del Segura, el consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Modesto Lobón, votó ayer en contra del Plan Hidrológico del Júcar en el Consejo Nacional del Agua que reúne al Estado, las comunidades autónomas, los entes locales, los organismos de cuenca, las organizaciones profesionales y económicas relacionadas con los distintos usos del agua, los sindicatos, la patronal y las entidades sin ánimo de lucro estatales. Los argumentos de Lobón para oponerse a la ordenación de esta cuenca levantina son idénticos a los que ya expuso cuando rechazó el plan del Segura. "Ambos planes apelan con argumentos hídricos a posibles trasvases entre cuencas. Es decir, para superar el déficit hídrico de estas cuencas, los planes abren la puerta a trasvases entre cuencas y en este sentido la posición del Estatuto de Aragón y del Gobierno de la comunidad es muy clara, de total rechazo", señaló ayer el consejero. Aragón fue la única comunidad que votó en contra. El resultado final fue 66 votos a favor, 7 en contra y 11 abstenciones.

Con el informe favorable de hoy por parte del Consejo Nacional del Agua al proyecto de Plan Hidrológico del Júcar tan solo resta que este propio plan, junto con los del Tajo y Segura (también informados favorablemente por este Consejo), se aprueben definitivamente por el Consejo de Ministros para haber concluido la planificación de todos los planes de competencia estatal. Tras la aprobación de todos los planes de cuenca, el ministerio volvió a recordar ayer en una nota de prensa que "el objetivo del Gobierno es abordar un gran Pacto Nacional del Agua que garantice un suministro en cantidad y calidad suficientes y de una manera integral y solidaria en toda España. Resultado de este pacto será la propuesta de un nuevo Plan Hidrológico Nacional que contemple los acuerdos que figuran en este documento y materialice sus objetivos". En él, no se descarta el trasvase.

Por otro lado, la comisión de seguimiento de las obras del Pacto del Agua ya tiene fecha. Será el próximo 1 de abril en las Cortes de Aragón y contará con la asistencia, como es habitual, del ministro Arias Cañete.