El runrún de la presencia de la cepa británica en Aragón ya llevaba días en el ambiente después de que cuatro casos sospechosos se mandarán a finales de año a analizar a Madrid y de que esta variante se dejara notar en prácticamente todas las comunidades del país. Solo faltaba la confirmación oficial de algo que ya se daba por hecho y esta llegó este jueves con números: 15 muestras positivas compatibles con esta variante inglesa del covid tras analizarse más de 600 muestras.

Esto supone que la prevalencia estimada para el conjunto de Aragón es del 2,6%. «No es excesivamente elevada con los datos que tenemos y nos encontramos en niveles más bajos que otras comunidades. Llevamos en confinamiento perimetral varias semanas, lo que ha podido enlentecer la entrada de la cepa», dijo Javier Gómez-Arrue, responsable del laboratorio satélite de apoyo al diagnóstico covid del Centro de Investigación Biomédica de Aragón (CIBA).

Aquí llevan unos días analizando muestras positivas de coronavirus seleccionadas y enviadas por los servicios de Microbiología de los hospitales para buscar casos compatibles con esta variante. El muestreo es aleatorio con el objetivo es obtener datos de todos los sectores de Aragón y poder identificar las zonas con circulación del virus. En concreto, según los datos de Sanidad, las prevalencias halladas hasta ahora por sectores son del 4% en Zaragoza I y II (sobre todo en la capital); un 1,4% en el área de Zaragoza III y la zona de Calatayud; un 4% en Teruel; un 3,3% en Barbastro; y un 2,4% en Huesca. En el sector de Alcañiz no se tiene constancia de ningún caso relacionado con esta cepa.

Para hallar estos resultados el CIBA utiliza los kits de diagnóstico de ThermoFisher, que permiten detectar tres dianas diferentes (genes S, N y ORF1) y un nivel de detalle capaz de indicar pacientes que pueden estar afectados por la variante británica. En cualquier caso, los expertos insisten en que, independientemente de la cepa que circule, se debe seguir manteniendo las medidas de seguridad y distancia. «El interés de los datos son meramente epidemiológicos, porque el diagnóstico va a ser muy similar y el tratamiento también», dijo Florencio García, médico y técnico del Departamento de Sanidad.

Otras cepas

Hasta la fecha, en el CIBA se ha aplicado esta técnica con visión hacia la variante británica en un 15% de los casos positivos que Aragón ha registrado en la última semana, pero el laboratorio ya se prepara para ir un paso más allá. «Tenemos la intención de seguir analizando para crear una mejor imagen de la evolución de esta cepa en la comunidad, pero además a corto plazo queremos instalar equipos que permitan la secuenciación para disponer de muestras genéticas completas del virus», añadió García. En este sentido, las 15 muestras positivas a la posibilidad de corresponderse con la variante británica han tenido que enviarse a Madrid, al instituto de salud Carlos III, para que puedan ser secuenciadas y confirmadas definitivamente. «Esperamos los resultados en las próximas semanas», indicó el técnico. Es decir, lo que el CIBA quiere hacer es poder secuenciar y ratificar en su laboratorio las sospechas sin necesidad de derivar a ningún datos.

Esas pruebas más específicas podrían ayudar, por ejemplo, a detectar otras cepas como la sudafricana o la brasileña de las que, por ahora, no hay constancia en Aragón. «Estamos viendo cómo hacer un seguimiento activo de las cepas detectadas, pero también de otras posibles que han aparecido en otros lugares y que queremos tener controladas por si aparecen aquí», añadió el investigador Gómez-Arrue.

Por su parte, el presidente de Aragón, Javier Lambán, indicó que para él «no preocupa en demasía» la irrupción de la cepa británica en la comunidad dada su baja prevalencia, mientras que a nivel nacional alcanza alrededor del 13%. «Todos los indicadores están evolucionando de manera bastante favorable. Lo digo, como siempre, con toda clase de precaución, ya que otras veces hemos pensado que se aproximaba el fin y los hechos nos han desmentido», dijo.