El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón está trabajando actualmente en la planificación de la campaña de vacunación frente al coronavirus. De momento, y tal como informó ayer la DGA, la previsión es comenzar en el primer trimestre del 2021 con una primera fase en la que se podría vacunar a unas 90.000 personas. La previsión del Departamento de Sanidad es recibir en torno a 180.000 vacunas para poder vacunar con doble dosis a unas 90.000 personas de los tres colectivos priorizados. Al igual que ocurre con la vacuna antigripal, se trata de personas en residencias, profesionales sanitarios y sociosanitarios, y mayores de 80 años.

La Dirección General de Salud Pública, junto con la Dirección General de Asistencia Sanitaria y el Salud, está diseñando la logística para transportar, almacenar y llevar a cabo la vacunación de estas personas. Además, prestan gran atención a que posteriormente, y siempre de acuerdo con el suministro escalonado de vacunas y con las actuaciones coordinadas del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, se podrá ir inmunizando al resto de sectores de población.

La campaña de vacunación contra el covid-19 se llevaría a cabo, al igual que ocurre con la de la gripe, por parte de los sanitarios de Atención Primaria. Unos profesionales que, a falta de conocer toda la información que aún queda pendiente respecto a la vacuna del covid que va a llegar a la comunidad, se mantienen expectantes y con mucha incertidumbre a cómo se terminará gestionado cuando llegue el momento.

La presidenta de Satse Aragón, Pilar Návez, asegura que todo depende de cuándo se tenga que hacer y, sobre todo, «de la situación epidemiológica en la que se encuentre Aragón». Návez sabe que «tendrá que ser viable sea como sea» pero que actualmente ya van «apurados con la vacunación de la gripe». «Ahora mismo si hubiera que vacunar a la población sanitaria y de riesgo, sería muy complicado porque no hay recursos humanos», afirma Návez.

RECURSOS HUMANOS

Dicha escasez de personal con los que Sanidad cuenta actualmente es uno de los mayores problemas debido a que «si no hay menos ocupación en la uci y menos casos, la situación en Atención Primaria será muy difícil y extrema». En este sentido, Návez hace hincapié en el plan retorno que el Gobierno de Aragón ha planteado a los profesionales «que han emigrado y hay que recuperar».

De momento, y según contó un médico de Atención Primaria de Zaragoza, todos ellos se encuentran «expectantes y a la espera de saber cómo se desarrolla el plan de vacunación». A pesar de que aún quedan muchas dudas por resolver ante la llegada de las vacunas, una de las preguntas más frecuente es: «si enfermería se dedica a vacunar, ¿quién va a atender a los pacientes crónicos?».

Por su parte, la presidenta del colegio profesional de enfermería, Teresa Tolosana, presta gran atención a la gran labor que todos los años las enfermeras de Atención Primaria realizan en las campañas de vacunación. «Llevamos haciéndolo toda la vida pero ahora parece que se visibiliza mucho más y tengo fe en todas ellas y en la experiencia que ya tenemos».

Tolosana no duda que la campaña de vacunación contra el covid-19 «va a suponer mucho trabajo». Ante esta situación, la reciente elegida como presidenta del colegio asegura que van a necesitar «recursos y apoyo» y que más adelante, cuando ya se conozca qué tipo de vacuna llega, los plazos en los que las tienen que suministrar a la población y los requisitos pedidos por Sanidad, «se decidirá la planificación».

Ante una posibilidad de que pueda coincidir la vacuna contra el covid y una presión sanitaria complicada tanto por el coronavirus como por la gripe, Tolosana asegura que confía en que esto no ocurra debido a que cree que «la población ya sabe lo que estamos pasando y cómo se producen los contagios y el riesgo que corremos en determinadas ocasiones, por lo que todos debemos esperar un poco y conseguir que el sistema sanitario pueda tener capacidad para protegernos».