El Gobierno de Aragón acogió con «moderada satisfacción» los criterios con los que se repartirán los 16.000 millones de euros del Fondo Covid-19 que el Consejo de Ministros aprobó este martes, con los que se estima que la comunidad recibirá unos 400 millones, el 2,5% del total, equivalente al presupuesto anual del Instituto Aragonés de Servicios Sociales. Moncloa no detalló a las comunidades la cantidad exacta -entre otras cosas porque va repartida en entregas cuyas valoraciones pueden cambiar-, pero con los valores actuales, la cantidad se aproximaría a la citada.

El motivo de esta relativa satisfacción aragonesa, explicaron fuentes de la Consejería de Hacienda, es que finalmente se ha optado por tomar como criterio la población equivalente protegida, esto es, que se valora más la que es especialmente vulnerable al virus. El criterio de la población ha pesado más de lo inicialmente previsto frente a otros como los ingresos hospitalarios, los de la uci o los de las pruebas PCR practicadas.

Esto beneficiaba a la comunidad, menos afectada que otras sanitariamente. Pero además, dentro de este mayor peso del criterio de la población, valorar más la vulnerable, la envejecida, es otra ventaja en Aragón. Más de lo que hubiera sido ponderar la población ajustada, con criterios de dispersión territorial, que es lo que se suele reclamar pero que, en este caso, hubiese reportado menos fondos. De hecho, con los criterios iniciales del ministerio podrían haber llegado, fácilmente, 100 millones menos.

PARTIDAS

Por este motivo, algunas comunidades criticaron los criterios de reparto, considerando además que beneficiaban a Cataluña, por primar población y casos. Faltará conocer la crítica interna en la comunidad. Anteayer, en la comisión de Hacienda, la popular Carmen Susín vaticinaba que este reparto iba a dejar mal parado a Aragón. Pero como ni el consejero Carlos Pérez Anadón dio sus estimaciones ni ella las suyas, no se sabe qué consideraban bueno y malo.

En cualquier caso, los 16.000 millones de euros para todas las autonomías se dividen en tres grandes bloques: el sanitario, con 9.000 millones, el educativo, con 2.000 millones y el destinado a paliar la pérdida de ingresos por impuestos, con 5.000 millones, de los que 800 compensarán pérdidas en el transporte.

La partida sanitaria se dividirá a su vez en dos: 6.000 millones llegarán en julio, basados en los datos de población e incidencia de la enfermedad a 30 de abril. Los otros 3.000 lo harán en noviembre, con datos a 31 de octubre, por lo que los datos pueden variar e influir en el reparto.

Lo mismo sucederá con la partida para educación, que se entregará en septiembre, coincidiendo con el inicio del curso escolar, y el de los impuestos, que llegará en diciembre.