La comunidad de Aragón registró el pasado año, 2017, un total de 175 actos violentos contra el personal sanitario, y por ello desde el Departamento de Sanidad han recordado a los profesionales la importancia de denunciar si son objeto de alguna agresión.

Con motivo del Día Nacional contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario, el Departamento de Sanidad ha recordado a los profesionales de la comunidad la importancia de notificar este tipo de comportamientos para poder tomar las medidas adecuadas ante los mismos.

Desde el último semestre del 2017, a propuesta del Ministerio del Interior y las Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado han estado colaborando para la erradicación de esta conducta, así lo han indicado en nota de prensa fuentes del Gobierno de Aragón.

Por ello, desde el Ministerio se ha designado a un interlocutor policial y otro de la Guardia Civil a nivel autonómico, con los que el Servicio Aragonés de Salud ha establecido un protocolo de actuación conjunto.

Asimismo, en términos generales y en el marco de las actuaciones realizadas por los servicios de prevención, hay servicios que cuentan con apoyo técnico para la instalación de botones de alarma que se activan en otra consulta o espacio y colocación de barreras físicas, entre otros.

Además, se realizan iniciativas formativas e informativas, con diferentes cursos y materiales de formación así como otras excepcionales, como la solicitud de acompañamiento a las Fuerzas y Cuerpos del Estado para consultas a domicilios en aquellas situaciones en las que ya existe precedente de agresiones previas.

Por otra parte, fuentes del Gobierno han apuntado que el Departamento de Sanidad cuenta con un registro estandarizado sobre violencia en el lugar de trabajo desde hace varios años.

Así, en el 2017 esta Comunidad registró un total de 175 agresiones.

En cuanto al lugar donde se producen, mayoritariamente son en el ámbito hospitalario (108), seguido de los centros de salud (55).

Por tipología, principalmente han sido agresiones verbales (125) y físicas (68).

Del total de agresiones, 59 fueron denunciadas por médicos, 52 por enfermeras, 40 por técnicos de cuidados auxiliares de enfermería y el resto, 24, por otro tipo de categoría profesional.