Aragón representó ayer a las comunidades autónomas en el acto de presentación del Pacto Social por la No Discriminación y la Igualdad de Trato Asociada al VIH, que tuvo lugar en el Ministerio de Sanidad con la presencia de la ministra de Sanidad, Luisa Carcedo, y su homólogo de Interior, Fernando Grande-Marlaska.

El acuerdo suscrito ayer tiene como objetivo eliminar el estigma y la discriminación asociados al VIH y al sida, garantizando la igualdad de trato y de oportunidades, la no discriminación y el pleno ejercicio de los derechos fundamentales de las personas afectadas, con medidas en ámbitos sanitarios, laborales, educativos y científicos, entre otros. «Este pacto representa un importante avance en nuestro país porque no solo persigue una normalización social de esta enfermedad, sino que puede suponer un importante avance en la mejora de la calidad de vida de las personas afectadas», dijo.

Ventura destacó la «responsabilidad de las comunidades» en la gestión y planificación de las políticas de salud pública. «Las administraciones estamos en una posición privilegiada para ejercer la vigilancia de posibles situaciones de discriminación en nuestros diferentes territorios y proponer las correspondientes acciones correctoras», añadió Ventura. Aragón, a través del trabajo realizado por la Dirección General de Salud Pública, ha realizado un trabajo en la erradicación del estigma y la discriminación laboral de personas con VIH.

El pasado año se invitó a los sectores público y privado a revisar sus procedimientos de acceso a puestos de trabajo o servicios y a eliminar cualquier exigencia que suponga una discriminación hacia los ciudadanos que viven con VIH.

Certificados médicos / El pacto acordado por el Gobierno incluye asegurar que los certificados médicos no incluyan el estado serológico como un indicador del padecimiento de enfermedad infecto contagiosa; así como la promoción de políticas para evitar la discriminación laboral y garantizar el acceso a las técnicas de reproducción asistida y a la adopción.

«Una sociedad que discrimina no es una sociedad justa, ni decente», afirmó la ministra Carcedo, quien hizo hincapié durante la presentación del plan en los avances científicos contra el VIH, pero reconoció que «aún hay retos como acabar con el estigma del virus», dijo. En España cada año se diagnostican alrededor de 3.400 nuevos casos de VIH, de los que el 48% se hace de forma tardía. «De esto tiene mucha responsabilidad la discriminación que no se ha logrado erradicar», señaló.

Estigmatización a la hora de pedir una hipoteca, de solicitar un seguro médico o para entrar en una residencia de mayores son algunas de las barreras con las que se encuentran estas personas, según recordó ayer el presidente de la Coordinadora Estatal de VIH/sida, Cesida, Ramón Espacio.