Aragón registró durante el segundo trimestre de este año el segundo porcentaje más bajo de rupturas matrimoniales de todo el país, un 5,46% por cada diez mil habitantes. El Consejo General del Poder Judicial reveló que el número de demandas de disolución matrimonial, entre separaciones y divorcios, ha descendido en España un 10,3% respecto al mismo periodo de 2016 y es casi el doble de la cifra de Aragón.