Aragón ha llevado ante la Comisión Europea el trabajo de análisis sobre la despoblación en la comunidad que se está desarrollando a lo largo de este año y también las medidas concretas que hasta ahora se reflejan en una directriz que se aprobará de forma definitiva en octubre.

Según el director general de Ordenación del Territorio, Joaquín Palacín, la respuesta obtenida ante este esfuerzo es «muy positiva» y desde la Dirección General de Política Regional y Urbana de la Comisión Europea se ha recibido la propuesta de «liderar el trabajo conjunto con otras zonas con problemas de despoblación para que los efectos nocivos de la dispersión y la falta de servicios públicos entren en la agenda política».

Palacín destacó que la labor desarrollada en Aragón ha servido para «romper el hielo» y abrir una vía por la que se podría mejorar la distribución de fondos y ayudas. Aunque sea con un horizonte temporal alejado. «La maquinaria europea es pesada y los frutos no se recogen en pocos meses, no podemos olvidar que estamos hablando de muchos países con intereses cruzados», precisó.

La Comisión Europea ha destacado que la directriz busque «fórmulas concretas» para gestionar eficazmente los recursos disponibles.