Aragón se empieza a recuperar lentamente del paso de las consecuencias de la borrasca Filomena, pero continúan las bajas temperaturas extremas en gran parte del territorio de Zaragoza y Teruel. Aemet anuncia para hoy mínimas entre los -15º y -17º en las sierras de la Ibérica zaragozana, en el valle del Jiloca y en la Comunidad de Albarracín. Además ayer, la temperatura casi bajó a los 20 grados negativos en el valle del Jiloca. En esas zonas se mantiene todavía la alerta roja por bajas temperaturas.

Con todo, las mínimas han ido aumentando en otras partes del territorio y, de hecho, se procedió a la desactivación de la Unidad Militar de Emergencias (UME), tras prestar servicio en el Maestrazgo, el Campo de Daroca y, últimamente, en el somontano del Moncayo.

Las unidades de la UME desplegadas en Aragón, procedentes de Zaragoza y Valencia, se replegarán a sus bases de origen, según fuentes castrenses. No está previsto que se desplacen a Madrid.

El regreso a la normalidad se está llevando a cabo de forma gradual en el sector de las comunicaciones. De hecho, desde ayer ya circulan todos los trenes de media distancia de Aragón, salvo en el trayecto Calatayud-Madrid. Además, a partir de este jueves Renfe recuperará la circulación de las líneas Zaragoza-Castejón-Pamplona/Logroño y Zaragoza-Lérida, con paradas en todas las estaciones.

El jueves también se restablece el servicio en la línea Zaragoza-Caspe-Mora con paradas en todas las estaciones excepto en Fayón, informó Renfe.

Vuelta a clase

Por otro lado, ayer se produjo la vuelta a clase de los alumnos de todos los niveles (exceptuado el universitario, que no fue suspendido), tras los dos días de cancelación de las clases por la ola de frío. Sin embargo, todavía no volverán todavía 79 estudiantes, 46 en la provincia de Zaragoza y 33 en la de Huesca, que utilizan las cuatro rutas escolares suspendidas debido a la situación en la que se encuentran algunas carreteras.

En concreto, son las rutas escolares de Almudévar-Alcalá de Gurrea-Valsalada-San Jorge y Artasona del Llano y la de Castelflorite-Lastanosa-Capdesaso-El Tormillo-Los Sasos. Tampoco funcionará en las localidades de Allueva y Camarillas ni en la ruta Campillo-Jaraba-Ibdes-Carenas-Castejón de las Armas. Otro recorrido afectado es el que une Torrehermosa con Alconchel y Monreal de Ariza.

En toda la comunidad casi 350 estudiantes no pudieron llegar ayer a sus centros. Por lo demás, las quejas de los padres han sido limitadas y se mantiene la advertencia de mantener la precaución en los patios de los centros, pues en la mayoría se mantienen bloques de hielo y nieve acumulados.

Las nevadas han producido, al margen de Zaragoza y Huesca, un total de 17 afecciones en rutas escolares de la provincia de Teruel, lo que ha provocado que 255 alumnos no pudieran ayer asistir a clase, según el Gobierno de Aragón. Se trata de todas las de la zona de la sierra de Albarracín, las que iban a los IES de Andorra y Alcorisa, por el cierre de los centros, Allueva, dos rutas con destino Monreal y otras dos que terminaban en Montalbán.

Situación en Teruel

Además, se han producido retrasos en la ruta entre Odón y Calamocha y en la ruta Torrijo-Caminreal-Fuentes Claras-Poyo del Cid no ha podido acceder al primer municipio por hielo en la vía. Asimismo, han permanecido cerrados los institutos Leonardo Chabacier (Calatayud), Damián Forment (Alcorisa) y Pablo Serrano (Andorra), el Centro de Educación Especial Segeda (Calatayud), y los colegios de educación infantil y primaria Diputación Provincial (Brea de Aragón) y Pierres Vedel (Teruel), que ayer impartieron clase de forma telemática a su alumnado.

Por otro lado, con la vuelta a las aulas padres como los del entorno de barrio de Valdespartera en Zaragoza se encontraron con aceras en las que aún se acumulaba nieve a la hora de llevar a los niños a clase, un problema que se considera puntual y que no provocó problemas en las entradas a los centros.

Para ello, el Departamento de Educación dio orden de que los centros de Secundaria mantuvieran las calefacciones encendidas para evitar el estrés térmico, una indicación que también se trasladó a los ayuntamientos, responsables en el caso de los centros de Educación Primaria.

Carreteras nevadas

La Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Aragón (Fapar) señaló que los incidentes no fueron «generalizados» y recordaron que el cambio en los accesos a los institutos por culpa del covid (ahora ya no tienen una entrada principal) puede estar detrás de algunas de las complicaciones.

En cuanto a las comunicaciones por carretera, la situación ha mejorado sensiblemente. Con todo, más de 60 carreteras de Aragón continuaban ayer con nieve o hielo en la calzada, lo que dificultaba la circulación por varios tramos y mantenía cortadas a la circulación cuatro vías: tres en la provincia de Huesca y una en la de Teruel.

Se trataba de la A-2606 de acceso al balneario de Panticosa, la CHE-1429 en Almudévar y la HU-631 en Fanlo, en la provincia oscense, y la TE-V-3341 en Aréns de Lledó, en Teruel.

Además, en trece carreteras es obligatorio el uso de cadenas o neumáticos de invierno para circular y está prohibido el paso de camiones y vehículos articulados: una en la provincia de Zaragoza, la A-1307 en Belchite; 5 en la de Teruel, provincia que presenta más incidencias, un total de 33; y 7 en la de Huesca.

Siguen las cadenas

Siguen las cadenas Según informa la Dirección General de Tráfico en su página web, son la A-1704 en Frías de Albarracín; la A-2550 en Camarena de la Sierra; la TE-V-1143 en Rudilla; la A-2513 en Cutanda y la A-2514 en Fonfría, todas ellas en Teruel; además de la A-136 entre Sallent de Gállego y el puerto de Portalet; A-135 en Broto y en Torla; A-2605 en Jasa; A-2613 en Lascuarre; A-1603 en Santa Cruz de la Serós y A-1602 en Berdún, en la provincia oscense.

Las previsiones meteorológicas indican que el invierno se irá suavizando de forma paulatina hasta el fin de semana, si bien el frío seguirá instalado en las zonas de montaña del centro y sur de la comunidad. No tanto en el Pirineo, donde ayer Cerler dio 13 grados positivos a 1.500 metros de altura.

Viento en el valle del Ebro

Se registra ya una tendencia al incremento de los valores mínimos y máximos, pero de forma lenta, en una evolución que podría culminar el sábado que viene, según fuentes meteorológicas.

El cambio de situación se verá influenciado por el viento que empezará a mover las condiciones atmosféricas e impedirá las heladas. En zonas como Mequinenza es previsible que alcance los 70 kilómetros por hora. Y lo mismo sucederá en otros puntos del valle del Ebro. En Zaragoza, por otra parte, se anuncia una mínima de cuatro grados positivos, lo que significa salir de las heladas de los pasados días.

Por el momento no se ha hecho una evaluación de los daños causados por el temporal, tarea que tendrá que esperar a las tasaciones que realizarán los técnicos de las compañías de seguros. No obstante, los mayores perjuicios los han sufrido cubiertas de viviendas y otras instalaciones.

Menos daños que Gloria

GloriaEl Gobierno de Aragón todavía no dispone de una cuantificación económica de los daños provocados por la borrasca Filomena que dejó el pasado fin de semana cubierta de nieve toda la comunidad. Sin embargo, la consejera de Presidencia del Gobierno, Mayte Pérez, avanzó ayer que «parece que los daños no son tan cuantiosos como con Gloria aunque indicó que se siguen estudiando las afecciones del temporal.

Por el momento, mientras otras comunidades autónomas como Madrid y Castilla La Mancha han expresado su voluntad de ser declaradas como zonas catastróficas tras el paso del temporal, en Aragón, Pérez señaló que «quien reconoce como zona catastrófica es el Gobierno central», pero que en todo caso en la comunidad estaba activado el nivel 2 de emergencias, que es el que se debe activar para poder optar a las ayudas --si las hubiera-- para paliar los desperfectos generados por la borrasca. No obstante, Pérez indicó que «el perjuicio ha sido más a la movilidad, no tanto en infraestructuras», como ocurrió con la borrasca Gloria.