Aragón ya empezó a prescribir la semana pasada el ocrelizumab, un nuevo fármaco para la esclerosis múltiple que ha sido aprobado por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y está dentro de la cartera de tratamientos financiados por el Sistema Nacional de Salud. «La investigación en esclerosis es constante y los fármacos que teníamos ya eran buenos, pero este es eficaz, más cómodo y seguro», explicó a este diario José Ramón Ara, neurólogo en el hospital Miguel Servet, donde ya se ofrece esta medicación, y vicepresidente de la Sociedad Aragonesa de Neurología.

Se trata de un fármaco de segunda línea, que reconstruye el sistema inmune de forma menos agresiva, y su aplicación en el pacientes consiste en un pinchazo, por perfusión intravenosa, cada seis meses. «Se altera muy poco la vida normal del paciente porque supone ir un día al hospital, unas horas, y a casa. No precisa tampoco de controles médicos específicos», añadió Ara.

La primera dosis, en dos perfusiones de 300 miligramos, es administrada con dos semanas de diferencia y las posteriores en una única perfusión de 600 miligramos. La comercialización del ocrelizumab la hace la compañía farmacéutica Roche bajo el nombre de Ocrevus.

MENOS SECUELAS

Además, se trata del primer fármaco que funciona tanto para la esclerosis múltiple recurrente por brotes como para la progresiva. En el caso de esta última, afecta a uno de cada diez casos, la discapacidad es irreversible y, hasta el momento, no contaba con tratamiento. «Ahora se abre una puerta a la esperanza», añadió Ara.

En los dos tipos de esclerosis, el nuevo medicamento mejora la calidad de vida del paciente. En el caso de la recurrente, que va dejando secuelas, lo que hace el ocrelizumab es cortar los brotes y, por tanto, los efectos secundarios. En la progresiva, donde la enfermedad va creciendo poco a poco, derivando en secuelas, el fármaco frena dicha progresión. «Las secuelas son esperables siempre en un tratamiento, pero en este caso el fármaco es eficaz y con pocos efectos, al menos lo que sabemos hasta ahora. Hay otros parecidos al ocrelizumab, pero la experiencia positiva que se ha tenido con él en los pacientes hace que tengamos una expectativas muy buenas», explicó Ara.

MENOR DISCAPACIDAD

La aprobación europea del medicamento se ha basado en los resultados de tres estudios fase III del programa de investigación Orchestra, con 2.388 pacientes que alcanzaron el objetivo primario y casi todos los principales objetivos secundarios.

Según los resultados de dicho ensayo, los pacientes tratados con el fármaco tuvieron un 24% menos de probabilidades de sufrir progresión de la discapacidad confirmada a 12 semanas y un 25% menos probabilidades de tenerla a 24 semanas. «Es difícil afirmar que estamos ante el mejor medicamento de todos, pero sí está entre los mejores en eficacia, en seguridad y en comodidad. La experiencia hasta ahora es buena y las expectativas también», reiteró Ara.