La reubicación del mercadillo de Zaragoza ha generado un gran malestar y ha sacado a relucir la lejanía que existe entre el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) y las asociaciones de vecinos. Las entidades vecinales rechazan las dos propuestas conocidas, la explanada de la Estación de Norte y la plaza Eduardo Ibarra, a los pies de La Romareda.

Desde la Asociación de Vecinos del Arrabal, Rafael Tejedor lamentó que el Gobierno de ZeC «vuelva a crear un problema que no había». Mencionó la «contradicción» del equipo de Pedro Santisteve a la hora de pensar en el futuro de la explanada de la Estación del Norte. «En los presupuestos hay una partida de 200.000 euros para actuar en esta zona y ahora quieren traer el mercadillo. No tiene sentido», aseguró. A su juicio, el equipo de Gobierno debería trabajar para tratar de impulsar el proyecto de Covent Garden. «Esto sería dinamizar la zona, no solo hacerlo un día», precisó.

Además, según Tejedor este solar no está preparado para albergar esta actividad, ya que tendría que ser reasfaltado y carece de servicios básicos como los aseos.

Desde la Asociación de Vecinos Agustina de Aragón, Pablo Sánchez, aseguró que la plaza Eduardo Ibarra no está preparada para albergar el mercadillo. «En su día nos costó mucho sacarlo del barrio y ahora no vamos a permitir que vuelva», advirtió.

Hasta el 2006, los vendedores colocaron cada domingo sus puestos en lo que entonces era una zona de aparcamiento. La reforma de la plaza Eduardo Ibarra provocó su traslado, primero al barrio de San José y después al párking de la Expo. «La plaza tal y como está planteada no puede albergar 200 puestos, porque no hay espacio», explicó Sánchez. Además de jardines, una zona infantil, hay cuatro quioscos que «imposibilitan» el montaje de los stands, aseguró.

Por ahora no hay nada en firme, aunque las entidades vecinales ya le han trasladado al consistorio su malestar por la gestión que se está haciendo sobre el futuro del mercadillo y por no contar con la opinión de los barrios afectados.