La colaboración ciudadana permitió ayer detener a un menor por quemar siete recipientes de basura en la capital aragonesa. Intentó evitar el arresto, pero el recientemente creado subgrupo de contenedores de la Jefatura Superior de Policía en Aragón le localizó antes de que consiguiera incluso lavarse las manos manchadas de hollín.
El primer acto vandálico, cometido supuestamente por este joven, ocurrió sobre las 01.30 horas en la calle Uncastillo del barrio de San José. Allí cuatro depósitos ardieron en su totalidad, afectando el fuego a tres vehículos que estaban estacionados en los alrededores.
La Policía sospecha que estableció una ruta de quemas, ya que se trasladó a la calle Luis Aula, muy próxima a la anterior, donde quemó otra serie de contenedores. En este lugar, las llamas también provocaron daños en un turismo.
En ambos actos vandálicos, vecinos de la zona le identificaron y dieron la voz de alarma a la sala del 091 de la Policía Nacional que movilizó a varias patrullas. Estas detectaron la presencia de un joven corriendo por la calle Escultor Moreto, también en las proximidades, quien se intentó esconder entre dos vehículos al detectar la presencia de los agentes.
El menor llevaba sus manos manchadas de hollín, según fuentes policiales, además de dos mecheros y un teléfono que contenía diversos archivos de vídeo de contenedores ardiendo. Ante ello, los investigadores imputan al detenido la quema de siete contenedores y de cuatro vehículos. No obstante, la cifra aumentará, ya que la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana está analizando todo el material gráfico hallado en su dispositivo móvil.
FACTURA Un nuevo depósito de vidrio cuesta 800 euros y uno de materia orgánica y papel, 928. Su reposición no la paga el Ayuntamiento de Zaragoza, sino la empresa concesionaria de la recogida de basuras, FCC. A esa cifra es necesario añadir los daños producidos en vehículos, fachadas y demás mobiliario urbano que es contabilizado por las compañías aseguradoras. La factura total es siempre solicitada al imputado,.durante el juicio.
Cuando los detenidos son menores de edad, la responsabilidad civil recae sobre sus padres o tutores legales, quienes deben hacerse cargo de las correspondientes indemnizaciones y multas. El Código Penal establece que las personas que produzcan daños en bienes de dominio, uso público o comunal se enfrentan a penas de prisión de uno a tres años y multas de doce a veinticuatro meses.
