Agentes de Policía Nacional han detenido en los últimos días a cuatro jóvenes, dos de ellos menores de edad, como presuntos autores de diversos robos con fuerza cometidos en bares y en establecimientos comerciales de Zaragoza.
Según informó ayer la Dirección General de la Policía, los sucesivos robos fueron denunciados entre los días 14 y 24 de este mes y todos presentaban el mismo procedimiento de rotura de los cristales de puertas, escaparates y vitrinas para acceder al interior de los establecimientos.
El dispositivo de vigilancia puesto en marcha a raíz de estos sucesos permitió la detención, el pasado martes, de un menor cuando trataba de huir del bar al que había accedido junto a un cómplice, con el que se apoderaron de los 1.200 euros depositados en la caja registradora del establecimiento.
Al día siguiente, los agentes sorprendieron al cómplice huido cuando trataba de escapar de un local comercial en el que se había introducido y apoderado de tres gafas de protección solar valoradas en conjunto en más de mil euros.
Por otra parte, en el marco de una segunda investigación por hechos similares, agentes de la comisaría del distrito del Actur han detenido a dos jóvenes, uno menor, como presuntos responsables de dos robos cometidos en un bar de la plaza de los Lagos Azules, en el que se apoderaron de 155 euros de la caja, y en un comercio situado en la calle de los Lagos Corona, en el que causaron daños de consideración tras apropiarse de un botín de 30 euros.
DAÑOS ELEVADOS / En este sentido, este tipo de delitos de robo con fuerza genera en los propietarios un doble problema. Uno por la pérdida económica directa (los bienes sustraídos) y otra por los daños causados en la instalación, no solo de la puerta de entrada, sino también en el mobiliario y en el género expuesto.
Al margen se produce una gran alarma ciudadana, al igual que sucede con los robos en viviendas, pues crean una gran sensación de inseguridad en la opinión pública. De ahí la importancia de la colaboración ciudadana para detectar a los autores.
