La propuesta que la candidata a presidir Ciudadanos, Inés Arrimadas, lanzó ayer en Zaragoza supone un regreso «al centro político y liberal» frente a la «polarización» que, en su opinión, ha provocado el Gobierno de Pedro Sánchez en colaboración con Podemos y algunos grupos independentistas. Así, citó que en los lugares en los que tienen capacidad de gestión (como Madrid o Zaragoza) ya se notan «los buenos datos económicos», aunque sin recordar que para mantenerse en esas administraciones dependen de los apoyos de la ultraderecha que representa Vox.

La candidata, que se enfrenta al líder del partido en Castilla y León, Francisco Igea (que no tiene previstos actos en la comunidad), defendió en su intervención ante más de 150 militantes un plan «con hechos» para hacer frente al problema de la despoblación. Las medidas que Ciudadanos quiere poner sobre la mesa pasan por garantizar el acceso a internet, bonificar algunos impuestos y una tarifa plana para los autónomos. «No se pueden perder más oportunidades», indicó.

Arrimadas, que lanzó todos sus dardos hacia el Ejecutivo que preside Sánchez, reivindicó el feminismo que representa Ciudadanos al señalar que si logra la presidencia serán el único partido con una mujer ocupando todos los cargos de primera fila. «Estarán por su valía, no por su sexo», señaló. Y destacó que para «defender la igualdad» no se pueden alentar divisiones ni entre hombres ni mujeres ni entre territorios.

CONTRA EL SEPARATISMO

De hecho, la lucha contra el separatismo es otro de los pilares del programa de Arrimadas para la formación naranja. «Somos fundamentales para derrotar al nacionalismo», defendió a la hora de alertar sobre la «lluvia de millones» que Sánchez ha prometido a los dirigentes catalanes y vascos. «No está garantizando la igualdad territorial», manifestó.

En el encuentro con los militantes celebrado en el hotel Zentro estaban presentes, entre otros líderes autonómicos, el portavoz de Cs en Aragón, Daniel Pérez Calvo y la diputada estatal de origen oscense Sara Giménez, pues son los dos nombres aragoneses en la lista de Arrimadas.

«Ciudadanos es un partido muy vivo, muy fuerte que necesita devolver la ilusión a millones de españoles», afirmó al reconocer que tras el «mal resultado electoral» han pagado un precio más elevado que otras formaciones. «Cuando me dicen que el partido está fatal yo contesto que vamos a demostrar lo fuertes que estamos», dijo.