La Policía Local de Zaragoza arrestó anteayer por la noche a un conductor de 32 años, J. S. G., que se dio a la fuga atropellando a un agente para intentar eludir un control policial, al ir bebido y con el carnet retirado. La maniobra le salió mal, y además de los delitos contra la seguridad vial tendrá que responder por el atentado contra el agente de seguridad. Las consecuencias podrían haber sido peores, pero el agente de la Unidad de Apoyo Policial Operativo (UAPO) solo sufrió heridas leves en un pie.

La intervención, según informó el cuerpo municipal, tuvo lugar en torno a las 23.45 horas, en Conde Aranda. Los agentes dieron el alto al joven, pero este hizo caso omiso y aceleró, pasando por encima del pie de un agente. Finalmente consiguieron detener el coche, y comprobaron que tenía el carnet retirado por la pérdida de todos los puntos asignados y dio positivo en alcoholemia, aunque al parecer no superaba la tasa penal, ya que no le imputan este delito.

HERIDAS AL ESQUIVAR

El agente de la UAPO no fue el único herido anteayer por la acción de un conductor. Dos mujeres de 57 y 60 años resultaron igualmente lesionadas, de carácter leve, al lanzarse a la calzada para evitar ser arrolladas por un turismo que se subió a la acera.

El incidente ocurrió a las 18.15 horas en el paseo Reyes de Aragón, y al volante iba J. M. M. G., de 21 años. Por causas que se están investigando, perdió el control del coche y chocó sucesivamente con un contenedor, un árbol y un banco, que derribó. El joven resultó herido y trasladado a un hospital, aunque se le tomaron muestras de sangre para analizar una posible alcoholemia, si el juez así lo requiere.

Además, la Policía arrestó a las 6.30 horas de ayer a un conductor de 62 años, G. V., que conducía sin tener carnet una furgoneta con exceso de peso, en el Rastro de Zaragoza.