Edgar Leonardo Montaño Sánchez ha sido condenado a 17 años y medio de prisión por haber asesinado de una cuchillada por la espalda a Pedro Manuel Cardo, al que confundió con uno de los que le habían atracado hacía unos minutos.

El magistrado presidente del jurado le ha impuesto la pena intermedia entre lo que pedía el abogado de la defensa, Javier Notivoli --15 años--, y el de la acusación particular, Juan Carlos Macarrón --20--. Valora por un lado "la intensa maldad puesta de manifiesto por él al llevar a cabo la execrable acción", pero también que fuese bebido, aunque no le afectase. Además le impone una indemnización de 200.000 euros para la madre de la víctima y 25.000 para su hermano, como pedía la Fiscalía.

ATRACADO

Según lo que declaró probado el jurado, Montaño regresaba a su casa, la mañana del 1 de diciembre del año pasado, cuando dos individuos le atracaron en su portal. Subió a su casa, dijo a su mujer que llamase a la Policía, y tras coger dos cuchillos de cocina salió en camiseta de tirantes, diciendo que iba a "alcanzar" a los agresores.

En su camino, en la calle Escoriaza y Fabro, se encontró con la víctima, Manuel Cardo, a la que comenzó a gritar. Pero este no le oyó, porque llevaba cascos. Se le acercó, le quitó un auricular y le repitió que le diera algo, al parecer confundiéndole con su atracador. El joven le dijo que no llevaba nada y se volvió para seguir andando.

"Sin mediar más palabras, Edgar (...) sacó de la parte trasera de su pantalón uno de los cuchillos" y, "con gran fuerza y violencia se lo clavó por detrás, con el propósito de causarle la muerte", reflejó el jurado.

En este relato no consideraron probado que, como pedía la defensa, Montaño fuese afectado por el alcohol, aunque sí hubiese bebido. Tampoco que, por el tiempo transcurrido y la desproporción de la venganza, el condenado estuviese fuera de sí al acuchillar al joven y huir.

Y sobre todo no consideraron que, por mucho que la víctima viera al agresor ensangrentado y nervioso, tuviese oportunidad de defenderse. Por ello es un asesinato, un homicidio a traición, penado más gravemente.