Los asesinos del Badoo se enfrentan a la prisión permanente revisable

La familia del empresario vasco torturado y enterrado vivo por la conocida como banda del Badoo pide que los asesinos de José Antonio Delgado, de 50 años, sean condenados a prisión permanente revisable por este crimen. Junto a esta pena, la abogada Estefanía Rojo, solicita 6 años de cárcel por el delito de detención ilegal, en concurso medial con el de robo con violencia y otros dos por estafa. Asimismo, solicita una indemnización de 327.00 euros.

Hace una semana, la Fiscalía solicitó 58 años de prisión para Hendangelin Candy Arrieta y  Mohamed Achraf y otros 16 para José Antonio Meléndez que, supuestamente, participó en un asalto.

Apoyándose en la investigación de la Guardia Civil, la acusación particular define a Hendangelin Candy Arrieta como el gancho para atraer hombres. José Antonio Delgado fue uno de ellos, quien se desplazó desde Getxo hasta Luceni para conocerla. Viajó en su Mercedes Benz 220. Allí fue víctima primero de una emboscada y luego golpeado, reducido e inmovilizado con el afán de sustraerle sus efectos personales y el vehículo.

Pero no quedó ahí. Lo retuvieron en la nave, fue maniatado, y aprovechando su total indefensión, los acusados le dieron todo tipo de golpes con objetos contundentes en zonas con riesgo vital como la cabeza, el tórax y el abdomen. Luego cavaron una fosa donde lo enterraron vivo; habiéndose encontrado restos de tierra en la faringe, laringe, esófago y estómago de la víctima.

El hallazgo del cadáver de José Antonio Delgado en el paraje Juan Gastón, entre Pedrola y Pozuelo de Aragón el 27 septiembre del 2019 puso orden al rompecabezas con el que trabajaban la Unidad de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil y la Unidad Central Operativo (UCO) del instituto armado después de que dos hombres denunciaran unos hechos que eran propios de un guión de un thriller. Secuestros, descargas eléctricas, palizas en lo que parecía una nave mientras estaban maniatados a una silla y con los ojos tapados... eran parte de los relatos de la investigación. 

No fue la única, otros dos hombres  --representados por el abogado José Cabrejas-- fueron asaltados, pero lograron salir vivos.

La Guardia Civil encontró, meses más tarde, durante los registros en la nave donde vivían Candy y su novio, un palo de golf, unas gafas graduadas y una bolsa de viaje de la marca Emporio Armani, que el empresario llevaba en su coche cuando la pareja lo asaltó. Los agentes recuperaron del váter de la casa varias joyas del fallecido, entre ellos, una cadena dorada y una alianza, de las que la venezolana había intentado deshacerse mientras inspeccionaban la vivienda