José Manuel García-Figueras, asesor jurídico de Plaza que ahora continúa como letrado externo, ha defendido la actuación de las instituciones con respecto a la Plataforma Logística, pero ha admitido que deberían haber sido "más exigentes en algunos procedimientos y controles internos".

En su comparecencia ante la Comisión de Investigación de las Cortes de Aragón para dirimir si hay responsabilidades políticas en la gestión de la Plataforma Logística de Zaragoza, el abogado, que estuvo presente en los consejos extraordinarios de Plaza de manera continuada ha aseverado que los consejeros tenían total acceso a toda la información de la sociedad, que en ningún caso hubo ninguna limitación para acceder a la misma y que "no se adoptó ninguna decisión que fuera conscientemente ilegal".

En cuanto a los pagarés, García-Figueras ha aclarado que era el consejero delegado quien podía firmar pagarés por cualquier importe, mientras que el director gerente necesitaba del permiso del anterior, lo que le consta que se cumplía "porque los bancos no hubieran autorizado" otra operación.

Asimismo, ha recalcado que no se encargaba de asesorar en los procesos de adjudicación y licitación de obras y que los contratos con Codesport los conoce "por la prensa" y que, aunque se hubieran cometido errores la indemnización por el retraso de las obras era procedente y que lo debatible sería la cantidad de la misma.

Por otro lado, el asesor jurídico ha recordado que ninguna de las adjudicaciones fue impugnada, ya que se ajustaban a los pliegos, redactados por la DGA y con conocimiento del consejo.

García-Figueras ha declarado también que llevó cerca de 40 pleitos en los que reclamaban a Plaza 70 millones por la vía administrativa y 30 por la civil y que en todos los juzgados le dieron la razón.

Ha incidido también en que no se tomó ninguna decisión en contra de su criterio, dado que "todos los acuerdos se aprobaban por unanimidad" y si no se posponían, cosa que solo ocurrió "una o dos veces".

Sobre los anexos, que no pudieron ser encontrados para su investigación en las Cortes, ha dicho que eran "power-points" y que se metían en una caja tras los consejos.

"Tienen que estar en Plaza perfectamente localizados porque los he visto yo", ha asegurado.

Por último, el letrado ha reconocido los problemas financieros de la plataforma logística, la "deuda enorme" que tiene, las "supuestas irregularidades" o Plaza Servicios Aéreos, que fue "un desastre", pero no de la propia plataforma, que funciona "sin ningún problema".

Del mismo modo, ha señalado que las compras de suelo a precios superiores se debían a las grandes necesidades que tenía Plaza y las pocas posibilidades a la hora de la adquisición y ha aclarado que los problemas son financieros, "deuda enorme" o de las supuestas irregularidades, no de la propia plataforma, que funciona sin ningún problema.