La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) considera que hubo una «sobreexposición» al riesgo por parte de miembros de las patrullas rurales del cuerpo carentes de la preparación adecuada para hacer frente al exmilitar serbio Norbert Feher, conocido como Ígor el ruso, autor del triple asesinato de Andorra el pasado 14 de diciembre.

Fuentes de esta asociación explicaron a Efe que no se valoró «suficientemente» la peligrosidad del presunto criminal a pesar de que unos días antes de producirse los asesinatos, el exmilitar estuvo «a punto» de provocar la muerte de dos personas en una masía del cercano municipio de Albalate del Arzobispo.

Añadieron que la Guardia Civil no es responsable únicamente de esta situación, ya que la Delegación del Gobierno en Aragón fue informada puntualmente de cada una de las situaciones que se produjeron desde el primer momento y tenía la opción de ordenar un dispositivo con especialistas en la búsqueda de criminales peligrosos. A juicio de estas fuentes, los hechos registrados en Albalate eran lo «suficientemente graves» como para ordenar un dispositivo «muy especial» para la búsqueda del sospechoso, no con unidades territoriales de Teruel, sino con unidades especializadas del cuerpo como el Grupo de Reserva y Seguridad.