La convocatoria de paros parciales en el servicio de autobús urbano anunciada por el comité de empresa de Avanza Zaragoza para el próximo mes de marzo no ha sentado nada bien a la dirección, que entiende que «parece que solo quiere chantajear a la ciudad sin ni siquiera hablar» sobre los supuestos incumplimientos que denuncia para justificar la huelga. Hacía diez meses que no se producían.
«Hemos demostrado que estamos abiertos a buscar soluciones a las mejoras que planteen», afirmaron fuentes oficiales, que admitieron que «ha habido despidos, pero responden a motivos disciplinarios y por causas objetivas» y explicaron que «el 97% de la plantilla tiene contrato fijo», por las criticas a la temporalidad. Sobre las horas extra, recordaron que «no se hace nada gratis». Respecto a las frecuencias, «están en vigor desde el 2017 y son las que establece el ayuntamiento».
