La Caja de la Inmaculada (CAI) aportará en torno a un millón de euros al nuevo plan de infraestructuras para la atención de personas con discapacidad psíquica que impulsan el Gobierno de Aragón y la Federación Aragonesa de Asociaciones de Personas con Disminución Psíquica (FEAPS).

El proyecto se desarrollará durante los tres próximos años y contempla la construcción de centros asistenciales, así como la reforma y equipamiento de los ya existentes en Huesca, Teruel y Zaragoza.

Las aportaciones de la CAI se destinarán a mantener y crear un total de 510 plazas en centros ocupacionales, asistenciales y formativos.

El plan continúa las actuaciones que se realizaron entre 1999 y 2003 y tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de los discapacitados y de sus familias.

Además, Zaragoza contará en los próximos meses con un nuevo centro asistencial para jóvenes con discapacidad física y psíquica sin recursos económicos. El proyecto, promovido por los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca, cuenta con el apoyo de la Obra Social y Cultural de la Caja de la Inmaculada.

El nuevo centro se ubicará en el número 5 de la calle Monasterio de Nuestra Señora de los Angeles, tendrá una capacidad de 20 plazas y atenderá a jóvenes disminuidos, procedentes en su mayoría de familias con limitados recursos económicos a las que les resulta difícil acceder a residencias privadas por su coste económico. Una vez en funcionamiento, el centro paliará la escasez de plazas para discapacitados con problemas psíquicos existente en Zaragoza.