El Ayuntamiento de Zaragoza quiere peatonalizar la céntrica plaza Santa Engracia. Se trata de una de las prioridades del equipo de Gobierno de Azcón, a tenor de los recortes que han sufrido otros proyectos que llevan años a la espera de ver la luz, y en la que está trabajando el área de Infraestructuras. No será la única que se reinvente pensando en los peatones, porque la de Salamero también sufrirá una reforma, aunque en este caso será semipeatonal.
El equipo de Gobierno de la ciudad ha manifestado en más de una ocasión su interés en embellecer las calles y plazas, y devolver este espacio a los peatones, en detrimento del vehículo privado. Por ejemplo, lo está haciendo con las motos, bicis y patinetes que ya no pueden estacionar en las aceras del entorno de la plaza de Los Sitios y que quieren hacer extensible al resto de los barrios.
Una de las ventajas que tiene la plaza Santa Engracia es que no hay garajes, por lo que podría peatonalizarse sin ocasionar problemas a los residentes. Una las opciones que se barajaba era ampliar la cota cero para que fuera semipeatonal, aunque parece que la intención del área de Infraestructuras pasa por acometer una reforma integral en la que, por otro lado, el busto de Joaquín Costa adquiriría más protagonismo e incluso podría compartir espacio con el recuerdo a las víctimas del covid.
En febrero del 2017, y como respuesta una de las peticiones vecinales más votadas en el proyecto de presupuestos participativos, el Servicio Técnico de Infraestructuras ya barajaba dos alternativas para su reforma que servirán de guía para el proyecto que está dirigiendo la concejala Patricia Cavero. Por un lado, proponía conservar el jardín central a través de una pavimentación sencilla a un solo nivel para peatones a su alrededor. Esta obra tendría un coste aproximado de 220.000 euros. En el caso de que el consistorio decidiera llevar ejecutar una reforma más profunda eliminando la zona verde, se replantearía una nueva distribución peatonal que elevaría hasta los 270.000 euros el coste. Las obras rondarías los 6 meses en ambos casos.
Este proyecto también implica al área de Movilidad porque aunque el tráfico en esta plaza es residual, se suprimirían tres plazas de carga y descarga, cinco de coche y un aparcamiento de motos.
En cuanto a la plaza Salamero, su futuro depende de los informes técnicos que esclarezcan los motivos por los que se produjo un abombamiento del techo del párking. El equipo de Gobierno ya ha dicho en más de una ocasión que quieren salvar las zonas verdes, con árboles de gran porte, aunque las primeras hipótesis apuntan a que el excesivo peso de los parterres pudo influir.
El área de Hacienda aprobó hace unos días una modificación de crédito de 10 millones para pagar los microcréditos que han sacado adelante para ayudar a los autónomos y pymes, y lo ha hecho reduciendo las partidas de proyectos como la avenida Cataluña o la mejora de la iluminación del parque Pignatelli.
