Mientras continúan las investigaciones sobre las causas que provocaron el pasado sábado por la noche dos incendios en el llamado edificio de la Esperanza de El Gancho, okupado desde hace muchos años, el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha avisado que no descarta que se clausure. La decisión se adoptará una vez que los técnicos de Urbanismo inspeccionen el bloque y se constate su estado.

«Hay que tomar una decisión para reducir el uso de ese inmueble al mínimo posible», ha explicado el primer edil, que ha adelantado que será «muy difícil» que tenga la condición de habitabilidad necesaria para permitir la entrada de nuevas personas. «Si no la tiene se tendrá que clausurar», ha asegurado para pasar a recordar que el problema actual que se vive en El Gancho y el entorno de Pignatelli y Zamoray no es nuevha declarado, más bien es producto de años «de abandono». «Este gobierno de PP-Cs no mira hacia otro lado», declaró. Sin embargo, los vecinos no opinan lo mismo.

Desde la Plataforma de El Gancho están «hartos» de que se vendan soluciones «en papel» en lugar de actuar. Reclaman más cámaras de vigilancia, más presencia policial y medidas «reales» que permitan devolverle a este céntrico barrio la tranquilidad. «Hay más de un centenar de infraviviendas y seguimos esperando que desde Urbanismo decidan qué hacer», explica el representante de la plataforma, Óscar Villanueva, que ha solicitado un encuentro con el presidente de la junta de vecinos del Casco Histórico, Alfonso Mendoza, y otra con el titular de Urbanismo, Víctor Serrano, para tratar de buscar soluciones conjuntas.

Este edificio de la Esperanza de la calle Cerezo se convirtió en un ejemplo hace años, ya que, aunque okupado, sus inquilinos convivían con el resto de los vecinos. «El problema es que algunos se fueron o revendieron los pisos a otros okupas más problemáticos que se fueron apoderando de todo el bloque y lo han convertido en un narcopiso y un prostíbulo», aseguraron desde la plataforma. No es el único narcopiso de la zona. En las últimas semanas se han llevado a cabo redadas en un edificio de similares características en la calle Aguarones por el menudeo de las drogas.