José Miguel F. F. llevaba 32 años al frente de una sucursal bancaria de Banesto en la localidad zaragozana de Caspe. Un tiempo que hizo que, según los denunciantes, significaba no solo un aval como director sino que transmitía confianza para depositarle los ahorros de toda la vida. Ahora, 53 personas le sentarán el próximo mes en el banquillo de la Audiencia de Zaragoza por, supuestamente, estafarles.

El ministerio público cifra el dinero saqueado en casi un millón de euros y solicita que sea condenado a 17 años de cárcel como supuesto autor de los delitos de estafa, apropiación indebida y falsedad documental.

La acusación pública sostiene que este hombre manipuló cuentas de clientes disponiendo de su dinero sin consentimiento ni conocimiento por parte de los titulares en beneficio de terceros. También apunta a que, presuntamente, emitió documentos falsos de productos de inversión con tipos de interés no homologados por la entidad bancaria, «simulando con ello revalorizaciones y rentabilidades no reflejadas contablemente pero si en la libertad de los clientes a los que captaba ofreciéndoles estos extratipos».

Asimismo, se le procesa por, supuestamente, conceder créditos irregulares a nombre de clientes de la entidad sin el consentimiento ni conocimiento de los mismos, con intención de tapar desfalcos. Para ello, «suplantaba las firmas de los titulares de las operaciones».