El Ayuntamiento de Bardallur ha denunciado ante los medios de comunicación que una familia forastera, procedente de Épila, ha okupado ilegalmente una vivienda cueva existente en la localidad, en un barrio situado en un cerro. El alcalde de la localidad, José Miguel Domínguez, que ha comunicado el hecho a la Delegación del Gobierno en Aragón, asegura que estas personas no solo incumplen el confinamiento sino que además ponen en peligro a las numerosas personas mayores que viven en el pueblo, dado el peligro de propagación del coronavirus.

"Ante esta situación nos hemos puesto en contacto con la familia propietaria, que vive fuera de Aragón, pero no parece importarles mucho", dice el regidor, que indica que la vivienda, excavada en parte en una ladera terrosa, está algo degradada.

"No han venido a echarlos porque dicen que la única forma de hacerlo es que los propietarios denuncien la ocupación de su casa", lamenta Domínguez. "Los ocupantes ilegales van y vienen y nadie hace nada", continúa.

"El problema es la población superenvejecida que tenemos y el hecho de que los okupas vienen de un sitio donde se han declarado muchos casos de covid-19", agrega el regidor, que pide que la Guardia Civil intervenga para poner fin a la situación.