Las celebraciones familiares en ocasiones acaban como el Rosario de la Aurora, pero no es tan frecuente que terminen en el juzgado. El pasado domingo, sin embargo, un bautizo celebrado en el barrio zaragozano de La Almozara concluyó con el padre de la criatura detenido por intento de homicidio, al atacar con un cuchillo a la pareja de su madre. La víctima, sin embargo, solo se produjo heridas de defensa, y el arrestado de hecho fue puesto en libertad con cargos tras declarar ante el juez.

El incidente se produjo de hecho prácticamente al final de la celebración, según fuentes consultadas.

Al parecer el detenido, un veinteañero de orígenes colombianos, no vio con buenos ojos que su madre acudiese a la celebración con pareja, por causas que se desconocen. El bautizo de su hijo se desarrolló con normalidad, pero finalmente algo hizo estallar una discusión en la que el joven arremetió contra el hombre que acompañaba a su madre con un cuchillo.

Los agentes de Policía que le detuvieron en la calle Río Cinca del citado barrio zaragozano consideraron el episodio como un intento de homicidio, pero el agredido pudo defenderse y recibió principalmente heridas defensivas en las manos, antes de que otros invitados al convite intervinieran para detener la agresión. Después, el herido fue trasladado a un centro hospitalario.

INVESTIGACIÓN / Mientras, el agresor pasó a disposición judicial y quedó en libertad con cargos, en principio investigado por un delito de tentativa de homicidio, a expensas de que el avance de la instrucción pueda dejarlo en un delito de lesiones con instrumento peligroso, por ejemplo.

No es el primer caso que se recuerda en Aragón de celebraciones que se acaban complicando. El último que trascendió fue el de Mihai C. S., que el pasado mes de mayo aceptaba una condena de tres meses de prisión por una pelea con el hermano de su cuñado. En la boda de este último, también al final del convite (sobre las 7.00 horas, el 10 de julio del año pasado), encontró al novio, el flamante marido de su hermana, discutiendo con su hermano. Y sin mediar palabra, según reconoció al aceptar la pena, se enzarzó con él, mordiéndole la oreja hasta arrancarle el lóbulo, y le golpeó en la cabeza repetidamente.

Uno de los incidentes más curiosos que se recuerdan en Aragón fue una pelea en otra boda, en Calatayud, hace 13 años, en la que uno de los invitados acabó con una perforación de cuchillo en el pulmón tras una discusión. Esta se inició por desavenencias sobre la forma correcta de preparar la nata para tartas.