El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, y la representación sindical de los empleados municipales ratificaron ayer el preacuerdo económico que se incluirá dentro del próximo convenio colectivo. Este pacto pone fin al fuerte enfrentamiento entre ambas partes, que llevó a los sindicatos a protagonizar una sonora trifulca en el pleno del pasado viernes.

El equipo de Gobierno municipal PSOE-CHA ha asumido íntegramente la propuesta presentada por la Junta de Personal. Además, en caso de materializarse definitivamente, este acuerdo sería histórico, porque tendría vigencia para toda la legislatura.

Es la primera vez que el Gobierno y la representación sindical alcanzan un pacto por este periodo de tiempo, lo que, según el ayuntamiento, "garantiza la estabilidad y el mejor funcionamiento de la institución".

El pacto pretende garantizar el compromiso retributivo mediante la aplicación de los acuerdos alcanzados en la Mesa General de la Función Pública para el mantenimiento del poder adquisitivo de los casi 5.000 empleados consistoriales, más una mejora municipal.

De este modo y según recoge el preacuerdo, los trabajadores disfrutarán de incrementos del IPC real más el 0,4% para el 2004, porcentaje que subirá al 0,5% en los dos años siguientes y al 0,75% en el 2007.

La propuesta de preacuerdo ya ha sido aprobada por los sindicatos UGT, CCOO y OSTA. Por su parte, CGT y CSL se han desmarcado del pacto.