El debate sobre la aprobación del plan parcial de Arcosur y el futuro de la continuidad de las obras de urbanización acrecentó ayer la tensión con la que se vive entre los cuatro grupos municipales llamados a votar mañana en la comisión de Urbanismo. Un veredicto de resultado impredecible en el que ayer el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, aportó dos consideraciones clave al asegurar que "la pelota está en el tejado del PP" y que considera una "excusa" que se agarre a la imposición del tranvía para el devenir de un proyecto en el que, si no sale adelante la votación, "habrá problemas". Mientras afirmó que el grupo socialista tiene la conciencia "bastante tranquila" ya que han hecho caso "a casi todas las prescripciones" del PP.

Aún así, Belloch confió en el "buen criterio de todos" porque la junta de compensación "tiene dificultades". Las mismas que subrayó el portavoz de CHA, Juan Martín, que apeló a la "responsabilidad" de todos los partidos para que "las obras que se han empezado se terminen". "¿El PP, si gana las elecciones en el 2015, qué va a hacer con Arcosur?", se preguntó el nacionalista, quien incidió en que los servicios que requieren las familias que ya están viviendo allí o el nuevo colegio en Rosales dependen de este plan parcial.

Mientras, el concejal de IU Pablo Muñoz solicitó eliminar este punto del orden del día de la comisión ordinaria de Urbanismo y llevarla a una extraordinaria en la que se aporten más datos para valorar una decisión que ellos, por su parte, ya tienen tomada. Reafirmó que ese plan es "innecesario" por la ampliación del número de pisos en 1.667.

En esa comisión, señaló el edil, deberían informar de la estructura de propiedad actual, en especial a la entrada de la sociedad pública Sareb como propietaria; el índice de morosidad y los expedientes de expropiación que existen sobre los que el ayuntamiento puede verse obligado a asumir la condición de beneficiario; y los costes de urbanización actuales, que tal y como adelantó este diario serán de 28 millones de euros menos. Asimismo, pidió centrarse en dar los servicios que necesita la gente que ya está viviendo allí y no obviar la amenaza del interés de un fondo buitre extranjero para especular con su compra.