El Gobierno alemán pidió hoy una "estrategia de futuro" con inversiones al grupo automovilístico PSA Peugeot Citroën, tras culminar la compra al estadounidense General Motors (GM) del negocio automovilístico de Opel/Vauxhall.

El secretario de Estado en el Ministerio de Economía y Energía, Matthias Machnig, aseguró en un comunicado de que "PSA tiene la responsabilidad de presentar una estrategia de futuro para la nueva empresa".

Dentro de este término, Berlín espera inversiones, programas de desarrollo de productos y la articulación de un plan para los trabajadores de Opel, explicó el secretario de Estado.

Una vez concluida la adquisición, "debe empezar el trabajo en un plan para una nueva estructuración del negocio en Europa", apuntó Machnig, que pidió, asimismo, "promesas de inversiones vinculantes" y el reconocimiento de los derechos adquiridos por los trabajadores de las plantas alemanas.

En concreto, el secretario de Estado en el Ministerio de Economía y Energía reclamó el mantenimiento del diálogo social y el reconocimiento de los acuerdos laborales sectoriales.

PSA Peugeot Citroën anunció hoy que ha finalizado la compra al GM del negocio automovilístico de Opel/Vauxhall, una operación anunciada el pasado 6 de marzo y que le convierte en "número dos" del sector en Europa, por detrás del alemán Volkswagen.

Con esas dos nuevas marcas, según su comunicado, el grupo PSA representa una cuota de mercado del 17 % en Europa en el primer semestre, refuerza su presencia en los principales mercados europeos e impulsa su crecimiento a nivel internacional.

El grupo francés confía en obtener sinergias de 1.700 millones de euros anuales para 2026 gracias a esta operación.