La candidatura de Zaragoza para la Expo 2008 sólo tiene ventajas, pero no hay que confiarse porque la designación dependerá de la promoción del proyecto. Este fue el mensaje central del presidente de la Oficina Internacional de Exposiciones (BIE), Jianmin Wu, en su visita de ayer a la capital aragonesa, en la que pudo conocer personalmente las "grandes bazas" del proyecto, entre las que citó la unanimidad política y social, el tema universal escogido --agua y desarrollo sostenible--, la propia historia de la ciudad y la experiencia de España en la celebración de grandes eventos.

Jianmin Wu, que se deshizo en elogios, señaló que ahora es "clave" llevar a cabo un buen plan de comunicación para que los 91 países que forman parte del BIE lo conozcan al detalle y puedan así decantarse por Zaragoza. La decisiva reunión de la asamblea general de este organismo se celebrará los días 11 y 12 de diciembre, en la que se elegirá entre las candidaturas de Zaragoza, Trieste (Italia) y Salónica (Grecia).

El máximo responsable del BIE se mostró diplomático y no quiso pronunciarse sobre qué ciudad va por delante en la carrera por la Expo. No obstante, dejó muy claro que para ganar hay que garantizar de antemano un proyecto "bueno y válido" y esforzarse "mucho" en promocionarlo. "Hay que trabajar mucho para que los delegados de los demás países puedan ver claramente su candidatura. No hay que dormirse en los laureles ni subestimar a la competencia porque el gran enemigo del éxito es confiarse", sentenció.

ENTUSIASMO POLITICO Y SOCIAL Jianmin Wu acudió junto a su secretario general, el español Vicente González Loscertales, a la capital tras reunirse el martes en Madrid con el Rey, con el vicepresidente segundo del Gobierno, Javier Arenas, y con los secretarios de Estado de Asuntos Exteriores y de Relaciones con el Parlamento, Ramón Gil-Casares y Jorge Fernández Díaz, respectivamente. "Pudimos comprobar la unanimidad de las instituciones españolas en torno a la candidatura. Su majestad me hizo un comentario que verdaderamente me asombró: la Expo une a todos los partidos de España", confesó Wu.

Dicho consenso fue ratificado ayer de nuevo en Zaragoza por el presidente de las Cortes de Aragón, Francisco Pina, el delegado del Gobierno, Eduardo Ameijide, el vicepresidente de la DGA, José Angel Biel, y el alcalde, Juan Alberto Belloch. Wu también reconoció que se había quedado "impresionado" del entusiasmo popular tras conocer que ya hay 6.000 voluntarios de la Expo, e incluso vivirlo en su visita al centro de información de la muestra, en el Museo de Historia. "Hemos posado delante del edificio y una señora, al vernos, ha gritado: ¡Viva la Expo!", subrayó entre risas.

LAS VENTAJAS Preguntado por los puntos fuertes de la candidatura de Zaragoza, Jianmin Wu también se refirió al tema central de la muestra, el agua, que calificó de "excelente" por su repercusión mundial. En el listado incluyó la propia historia de la ciudad --"se han sucedido cuatro culturas"--, la "importante" experiencia de España en la organización de eventos internacionales --la Expo de Sevilla y los Juegos Olímpicos de Barcelona-- y la propia unión del tema con la ubicación de la muestra en el meandro de Ranillas. "El río rodea al emplazamiento y el pabellón puente está sobre el Ebro. Por todas partes se recuerda el tema al visitante", explicó.

El presidente del BIE visitó junto a varias autoridades el emplazamiento y conoció la ciudad a grandes rasgos gracias al viaje en un helicóptero militar, que se alargó en torno a media hora.