Aunque el día salió frío y lluvioso, el Black Friday no defraudó las grandes expectativas con las que el comercio aragonés afrontaba este año la que se ha convertido en la fiesta por excelencia del consumo. Como si del primer día de rebajas se tratara, cientos de consumidores no quisieron perderse la apertura de los centros comerciales y grandes superficies de Zaragoza, donde la afluencia de público fue abundante por la mañana y llegó a ser masiva en el horario de tarde. Todos buscan los mismo: descuentos, ofertas y oportunidades con los que aligerar el gasto de sus compras, en la mayoría de los casos de productos de tecnología y moda. Al margen de las tiendas físicas, gran parte del frenesí consumista se vive por internet.
Todo apunta a que este año se volverá a batir récord de ventas en el Viernes Negro, según aseguraron diversas fuentes del sector comercial, que sitúan el gasto medio de los aragoneses en una horquilla de entre 250 y 300 euros, en línea con las estimaciones del resto de España. A falta de un balance más preciso, las estadísticas de visitas de los grandes complejos de compras revelan un incremento de la afluencia. Así, los cuatro centros de El Corte Inglés de Zaragoza registraban ya a mediodía un 15% más de público que el año pasado. Grancasa y Puerto Venecia no ofrecieron datos concretos, pero las sensaciones también eran muy positivas. «El párking está lleno desde primera hora. Eso lo dice todo», señalaron desde el complejo situado en barrio del Actur.
El ambiente de compras fue generalizado en todas las zonas comerciales, que fueron un hervidero de gente cargada con bolsas. Los hay incluso que hasta se pidieron el día libre, como hizo María Hidalgo para «aprovechar al máximo y comprar con calma». Acompañada de varias amigas, optó por Grancasa para dar rienda suelta a su tarjeta de crédito en esta frenética jornada de consumo. Los más madrugadores tuvieron premio en este centro comercial, que obsequió a sus clientes con 10.000 euros en vales de 10 euros y ofreció 500 desayunos y 500 vermús gratis.
Aunque el gran comercio comenzó siendo el principal protagonista de esta tradición importada hace unos años de Estados Unidos, poco a poco los establecimientos de proximidad se han ido enganchando también a este fenómeno y ahora es difícil dar con una tienda que no cuente estos días con algún tipo de descuento o promoción. De hecho, más de 500 comercios de Zaragoza han decidido pasar a la acción para hacer frente a las agresivas campañas publicitarias de las grandes marcas y superficies. A través de una iniciativa impulsada por la federación de empresarios del sector Ecos, hoy repartirán entre los clientes vales de 5 y 10 euros de descuento directo sobre el valor de sus compras.
ENCENDIDO DE LUCES
El Black Friday ha pasado a suponer el pistoletazo de salida para la campaña comercial de Navidad, algo que quedó simbolizado ayer con el encendido de la popular iluminación navideña de la fachada de los centros de El Corte Inglés. En el de Sagasta, el acto tuvo un carácter solidario ya que los encargados de presionar el botón del alumbrado fueron la presidenta de Cruz Roja Zaragoza, Pilar Cintora, el gerente de Aspanoa, Juan Carlos Acín, y la presidenta de Clowntagiosos (payasos de hospital), Ana Colás. El grupo del triángulo verde donó juguetes a estas tres entidades para que puedan repartir «la ilusión de la Navidad a todos los niños». Por su parte, Puerto Venecia hará hoy el encendido de luces (a las 19 horas) de la mano de Papa Noel y el grupo infantil Pica Pica.
La jornada también fue motivo para la reivindicación laboral. El sindicato OSTA denunció que parte de los trabajadores del comercio tienen que «pagar el beneficio de los de siempre a costa de la conciliación» al no estar acogidos al convenio del textil de Zaragoza, que garantiza la voluntariedad del trabajo en días especiales como el Black Friday.
