Los bomberos de Sabiñánigo que atendieron en Monrepós al conductor de una grúa que falleció cuando iba a retirar uno de los coches involucrados en un accidente ocurrido el lunes lucharon durante veinte minutos para salvar al operario. Fuentes del Cuerpo explicaron que los efectivos estaban ayudando en lo posible a normalizar la situación de caos provocada por el siniestro: "De repente, al conductor le dio un infarto, por lo se le intentó reanimar con los medios disponibles en ese instante". Como no había ninguna UVI móvil, se solicitó una a Huesca y hasta su llegada los bomberos estuvieron en contacto con los médicos para intentar salvar al fallecido. Los sanitarios usaron un desfibrilador para reanimarlo, pero no fue posible.